Francisco, está enamorado de Dana, la chica que ve pasar todos los días por la ventana de su casa. Pero hay un problema, el es demasiado tímido y a pesar de que están en la misma clase nunca a tenido el valor de hablarle.
Su obsesión por estar cerc...
Me entrego el bauche con la tarjeta y decía código 58, osea que no tengo plata en la cuenta pero aún así este panita me salvó la patria. Estoy full agradecido con el. En la semana vuelvo y le compro 3 perritos más.
—¿Nos vamos señorita Parada?. —Le pregunté a Dana en un tono juguetón.
—Por supuesto señor Benítez. —Respondio siguiéndome el juego.
Me arme de valor y le puse el brazo por encima del hombro, he visto que mis amigos hacen esto todo el tiempo cuando están conociendo a una chica, creo que es algo así como un ritual que hacen antes de tomarlas de la mano, no estoy seguro la verdad. Resulta que vivimos prácticamente cerca, ella un vive un poco más arriba en el cerro y mientras que yo estoy prácticamente al lado de la parada del metro. Esa es la razón por la que la veo todos los días pasar al frente de mi casa. Me dijo que vive en El Valle desde pequeña, a diferencia de mi que me mudé hace unos 6 años. Así es, tengo 6 años viendola y es la primera vez que hablamos.
Decidí acompañarla hasta su casa, después de todo ella se tomó la molestia de entregarme mi bolso. Llegamos a la parada de autobús, pagué el pasaje y mientras esperábamos a que se llenará el colector de acercó a hablarle a Dana
—Hola Fresa, tiempo sin saber de ti vale, me tienes abandonado
—Nada que ver cariño, el liceo me tiene full.
—Pero me estás diciendo que no tienes tiempo ni para un mensajito mi amor
—Hubieras empezado por ahí chamita, eso se resuelve rápido. —Responde sacando el telefono— ¡Richard! Hazme una recarga ahí para el número de la fresa, ¿Si va?. Y de una vez me pasame tu pago móvil para que me mandes 20 bolívares de queso.
El colector estuvo chanceandosela por todo el trayecto, es un camino que no debía durar más de 5 minutos en autobús pero el chofer le estaba haciendo el favor al colector de ir a un kilómetro por hora para que el chamo siguiera sacándole conversación. Me puse celoso de nuevo. Se que no soy nada de ella, ni siquiera su amigo, así que no tengo derecho a decir algo y opinar en este momento. De la nada el colector dijo algo a lo que no le presté atención, creo que fue sobre invitarla a la playa pero ella respondió
—No creo que no novio me deje
Inmediatamente el autobús arrancó a 937394+739494939+92838 kilómetros por hora e inmediatamente llegamos a la casa de Dana. Enseguida volvi a la realidad, Dana tiene novio y si bien quiero tener algo con ella no sería justo para el que un random viniera a quitársela. Me baje del autobús y le di la mano a ella para que se bajara. Su casa no es muy bonita que digamos, está hecha de ladrillos , una que otra canilla pintada de blanco y el techo es una lamina de zinc que está fija por unos pedazos de alambre.
—Entonces, aquí nos despedimos, ¿Chamita fresa?, jaja
—Chica fresa no, tú no me digas así, eres diferente a ellos
—¿Diferente en que sentido?
—Ellos solo se preocupan en invitarme a salir pero no les importa como vuelva, tú por tu parte me acompañaste hasta mi casa, eso es algo que aprecio.
—Entiendo... Entonces, ¿Nos vamos juntos a clases mañana?
—No creo, esa bera socialista que está ahí ee de mi novio y a partir de mañana me voy a ir con el.
En eso la cortina que servía de ventana de su casa se mueve y un sujeto oscuro, cocoliso y con una cicatriz en el labio asoma si cabeza, llama a Dana y le hace señas enojado para que entre a la casa. Imagino que ese debe ser so novio, tiene pinta de que se escapó de Tocoron como dijo Carlos.
—Bueno, me diverti hoy, nos vemos otro dia—Dije mientras me iba.
¿Has experimentado lo que yo alguna vez?, hacerte falsas expectativas sobre tu futuro junto a una persona que deseas no es agradable. No es la primera vez que me pasa pero si la primera que lo experimento con esta intensidad, y encima está empezando a llover, está es como la continuación de lo que estaba viviendo hace unas horas. La lluvia me empapó todo, y sigo sin entender porque siento está mezcla de dolor con rabia e impotencia.
—¡Espera! —Grito Dana corriendo detrás de mi.
Me encanta si forma de correr, es como una mezcla entre lo elegante y atlético con las manos al nivel de la cintura. Venía con su Sombrilla rosada y en crocs rosados, no siquiera había tenido tiempo de cambiarse el uniforme. Pero, ya estoy llegando a mi casa, ¿Enserio corrió todo este trayecto?, ¿Por qué lo hizo?. Apenas llego hasta mi me dio la sombrilla y puso sus manos en las rodillas para tratar de agarrar el aire como dicen los viejitos.
—¿Te pasó algo?, me hubieras llamado o escrito un mensaje
—Ese... Es el problema.... No tengo tu número, ¿Me lo das?. —Pregunto poniendo una cara tierna.
¿Vino corriendo para eso?, me dijo que soy diferente,¿ sera que se fijo en mi de alguna forma?
Seguí el consejo de Carlos y le di el número de mi abuela, ella es Digitel así que lo usaré por ahora mientras compro un chip nuevo.
—Por cierto, sabes que necesitaba ayuda con unas tareas de matemáticas y geografía, ¿Será que podrías ayudarme con eso?
—Vale por supuesto, que es lo que necesit...
No me dejó terminar de hablar cuando ya me estaba entregando su bolso, y me estaba dando las gracias para irse corriendo. No se si había piedras aquí pero pesaba como 20 toneladas.
-¡Espera!, ¡tú sombrilla!, ¡Te vas a mojar! -Dije gritando
-¡Consérvala!, ¡No quiero que te mojes!, ¡Yo corro rápido!
Termine de llegar a casa y mi abuela me recibió emocionada diciéndome que una amiga me había enviado un mensaje, inmediatamente lo tome y me dispuse a leerlo
—“Señorito Francisco Benítez, gracias por la invitación a comer perros y acompañarme hasta mi casa, lo veo mañana en la escuela con mi tarea. ATTE: Dana Parada"
Mañana en la escuela, esto significa que voy a poder hablar con ella mañana de nuevo , y si mañana me pide que la ayude con su tarea pasado mañana también tendré una razón para háblale. No importa cuantas tareas tenga que hacerle, pero si me sirve como excusa para acercarme lo haré y cuando se de cuenta de lo amable, respetuoso, trabajador y determinado que soy la terminare conquistando, no importa cuánto tiempo tenga que esperar. ¿Es normal pensar así?, mañana le pregunto a Carlos, pero ahora lo que más me emociona es que tengo la sombrilla de la chica que tanto me gusta, está ahora es Mi Sombrilla Rosada
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