𝟎𝟎𝟕. 𝐀𝐭𝐫𝐚𝐩𝐚𝐝𝐨𝐬

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Aspen

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Aspen

No supe en qué me quede dormida porque desperté y  noté que ya no  seguía en el suelo dándole la espalda a la puerta y al parecer Oscar también se había quedado dormido.

—Piastri...—me levante para despertarlo y vi la hora de su celular, eran las ¿¡11:30 de la noche?! Camine hacia la puerta para al intentar abrirla no pude— No, No, No ¡OSCAR!

El australiano se levantó asustado pero al verme preocupada se acercó a mi, aún seguía un poco dormido.

—¿Por qué me despiertas?

—Estamos encerrados.

—¿¡QUE?! Eso no puede ser.

Intento abrir la puerta pero era en vano.

—¿Quien fue el imbecil? ¿No se dieron cuenta que estábamos aquí? Le llamaré a Lando.

Caminó hacia su celular y comenzó a llamarle al británico mientras intentaba marcarle a Rosie o Lia pero ninguna me contestaba.

—De seguro ya están dormidos.

—De seguro están teniendo sexo Aspen, es fácil sáberlo. Lando siempre me contesta a menos que... iu olvídalo—colgó.

—¿Que vamos hacer?

—Pues—suspiró— esta el sillón , no es tan grande pero funciona y está cómodo.

—¿Y tú donde vas a dormir?

—En el sillón.

—¿Que? ¿Y donde voy a dormir yo?

El australiano suspiró y se acercó a mí para tomar mi mano y acercarnos al sillón.

—Conmigo

Palidecí. Una cosa era dormir en la cama con dos almohadas en medio y otra muy diferente dormir prácticamente encima de él.

—Es eso o duermes en el piso

—¿Y por qué tú no duermes en el piso?

—Es mi cuarto de descanso

—No pienso dormir contigo.

—Bien, entonces que duermas bien en el piso.

Dicho esto se acosto en el sillón después de apagar las luces. Lo mire sorprendida, era un insensible .

—Buenas noches

Me volví a sentar en el piso recargada en la puerta, estaba demasiado cansado y mis ojos se cerraban poco a poco, hasta que sentí que ya no pude más y me quede dormida recargada en la puerta.

Me volví a sentar en el piso recargada en la puerta, estaba demasiado cansado y mis ojos se cerraban poco a poco, hasta que sentí que ya no pude más y me quede dormida recargada en la puerta

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𝐉𝐄𝐎𝐍𝐆; 𝐎𝐬𝐜𝐚𝐫 𝐏𝐢𝐚𝐬𝐭𝐫𝐢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora