No fue difícil conseguir lo que "quería". Monoma se le pegó cuál pulga luego de haberle hablado por primera vez, y Shinsō ya no intentaba quitárselo de encima porque, bueno, era inútil, y un poco de compañía no le haría mal, ¿no?
Había comenzado un entrenamiento con el profesor Aizawa Shōta, tutor de la clase A, y ahora su mentor, luego de haber llamado su atención en el festival deportivo.
Según el profesor Aizawa, ese entrenamiento iba a ser su boleto de entrada al curso de héroes, por lo que tenía que tomárselo con seriedad, y esforzarse lo mayor posible.
Para Shinsō era difícil. Aunque estaba apuntando a la cima, y aunque su singularidad no fuese de ataques físicos, no había buscado una forma de entrenar que le proporcionara ventaja al respecto, así que ahora estaba haciendo algo completamente distinto a su rutina original, y había sido todo un dolor de cabeza adaptarse.
Bueno, ese no era su único dolor de cabeza. Sumado a eso, cada vez que encontraba un momento de descanso, este era alborotado por cierto rubio chillón y enérgico, quien había salido de quién sabe dónde a robarle toda su paz y tranquilidad.
—Creo que nos subestiman, Shinsō, ¡y tenemos que cambiar eso!
—¿De qué estás hablando ahora? —Shinsō no prestaba atención al 80% de las cosas que Monoma decía, aunque mayormente Monoma ni siquiera se percataba.
—¿No me escuchaste? ¡Todos! —El rubio alzó las manos con dramatismo—. La clase B, estudios generales, los departamentos, ¡todos! todos estamos en la sombra de la clase A, a pesar de nuestro esfuerzo...
Shinsō rodó los ojos mientras Monoma seguía parloteando, aunque tenía que decir, que en cierto modo estaba de acuerdo con el chico, después de todo, consideraba que muchos de los chicos de la clase A habían sido bendecidos con singularidades increíbles para ser héroes, y otros, tenían que poner un mayor esfuerzo en llamar la atención para llegar a la cima, aunque sus objetivos e intenciones fueran las mismas.
Tal vez Monoma era escandaloso y molesto, pero Shinsō no podía evitar darle la razón en ciertas cosas, aunque no lo admitiría en voz alta, por ahora.
—¿Nunca cierras la boca? —interrumpió cuando Monoma comenzó a reír de forma ruidosa luego de hacer un chiste sin gracia sobre la clase A.
—Tú no me dices qué hacer —protestó cambiando su expresión burlona a un ceño fruncido.
Shinsō suspiró, frotando su rostro con cansancio.
—Oye, tus ojeras se ven más oscuras últimamente —soltó Monoma alzando una ceja.
—¿Qué? —Shinsō negó con la cabeza—. Me da igual.
—¿Sabes? Yo también tenía ojeras, pero se quitaron enseguida cuando...
Y ahí iba de nuevo, a charlar sin cesar.
Monoma realmente era impulsivo cuando se trataba de hablar, soltando todo rápido y sin detenerse a pensar un momento, pasando de un tema a otro completamente distinto y apenas dejando a Shinsō participar de la conversación, aunque a este tampoco le interesaba comentar nada. Él era todo lo contrario, callado y con poca paciencia, aunque, por alguna razón, su paciencia no parecía acabarse cuando se trataba de Monoma, a pesar de quejarse de lo irritante que era, nunca había hecho algo para deshacerse definitivamente de él.
Tal vez solo era que los conflictos le daban pereza.
En todo caso, no era una amistad tan cercana, eran compañeros que charlaban cuando se topaban, aunque a veces pareciera que Monoma lo buscaba a propósito, no se juntaban por nada más que por casualidad, y bueno, Shinsō no intentaba hablar con él, pero tampoco intentaba alejarse, así que Monoma tampoco se había alejado desde la primera vez.
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¡Hurry up, Shinsō!
FanficKaminari no cree ni una palabra de Shinsō cuando este le jura que se confesará a su enamorado antes de que acabe el año. (ShinMono)