Las clases de hoy, han terminado. El profesor de redacción, nos ha dejado mucho trabajo para este fin de semana. Admito que adoro mi carrera, pero a veces me da a pensar que los profesores se exceden con las tareas. Aunque, a pesar de todo, creo que vale la pena ir así de rápido. Ya que salimos mucho antes que cualquier estudiante debido a eso.
Estoy cansada, tomo mi mochila y salgo del edificio escolar. Matthew, mi mejor amigo del curso, me espera en la entrada. El siempre me acompaña.
Dice que quiere que llegue segura a mi casa, debido a que el año pasado tuve un accidente, que a mi parecer, me dejó una horrible maldición. Ver cosas sobrenaturales.
Sí, tal y cómo lo habéis imaginado. Soy una chica que puede ver fantasmas. Al principio, era aterrador, porque aparecían así, sin más, de la nada. Pero poco a poco, al paso de los días, me fui acostumbrando. Hoy día, he aprendido a sentir cuándo alguien está cerca, antes de verlo frente a mí, preguntándome si puedo verlo.
Y es que, al parecer, se exaltan cuándo se sienten observados. Algunos son tranquilos. Pero otros se alocan, llegando al punto de estarme acosando, aún en horarios saturados para mi. Siempre trato de hablar por lo bajo cuándo están conmigo dentro de la facultad. Es en esencia incómodo, tener a alguien que nadie más que tú, puede ver, sin que tus demás compañeros te vean cómo el bicho raro de la clase.
Matt y yo vamos caminando tranquilamente por la avenida principal, hoy no quise tomar el bus, así que llegaré tarde a casa. Matthew me observa con curiosidad. Sé que va a preguntarme algo, con respecto a mi "don", según su forma de ver las cosas, el ver fantasmas no es tan malo.
Matt, se detiene y toma mis manos. Sólo entonces me doy cuenta que estoy helándome, suspiro y veo mi aliento por el frío.—Deberias andar tu abrigo, estamos en pleno invierno y tú vienes muy desprotegida.
—Si, mamá –reimos–. Exageras, al igual que todos, Matt. Aunque debo admitir que hoy está más frío que ayer.
—Delasy, eres una descuidada –sonríe picarón–. Mamá me dijo, que es posible haya tormenta en estos días.
—¿Irás a ver a tu madre si se suspenden clases? –pregunté curiosa. Matt casi nunca se perdía de una vacación para ir a verla.
—Seguramente, de todos modos, no tengo cosas que hacer. Y tú, ¿qué harás si suspenden clases?
—No lo sé, tal vez vuelva a casa de mi tía Jos, iré a visitar a mis hermanos. Además, el aniversario de la muerte de mi madre está cerca.
—Cierto. Vaya... hace ya 3 años que pasó y aún hoy día lamento eso, Del. Es duro perder a alguien querido –suspira–. Y... ¿Qué sabes de tu padre?
—Lo último que supe, es que estaba cerrando negocios en Londres, espero que esta navidad si nos acompañe a ver a mamá.
—Tu vida parece un drama novelesco –se burla.
—Jajajaja no. Cashese y no moleste –ambos reímos–
Dejamos de hablar, de un momento a otro, sentí un leve mareo. De seguro había un espíritu no tan tranquilo, cerca de nosotros. Por alguna razón, empecé a sentir una sensación de peligro.
—Matt... –me desvanecí, Matt me tomó en sus brazos, sentí que optó por cargarme y ya no supe nada más.
Desperté, un poco perdida. Vi el techo, con un enorme poster de Asuna Yuuki pegado. Ésta no es mi casa. Estaba preguntándome dónde diablos me encontraba, cuándo Matt apareció en mi campo visual.
—Oh, ya despertó la bella durmiente.
—¿Qu-Qué.... qué me paso? –me dolía la sien, sentía como unas punzadas– ¿Cuántas horas llevo dormida?
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La Sombra de un Alma Exiliada [Pausada]
FantasyLa historia cuenta, las vivencias de Delasy, una joven estudiante de universidad, que tras un accidente de auto, es capaz de ver cosas que otros no ven. Una tarde, al salir de la escuela, se encuentra a una chica. De aspecto delicado y mirada perdid...