Capítulo 29: Decepción

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"Se me rompió el corazón antes de poder aceptar lo que sentía"

SeokJin salió de bañarse para ocultar las marcas de su llanto, sentía el corazón pesado y ahogado, la angustia y desesperación que enferma al ser humano y últimamente es así como se siente día tras día, enfermo y que va empeorando a medida que pasa el tiempo. No pudo apartar los ojos de su reflejo en el espejo, ¿qué era lo que Jungkook y Choi Doyun veían en él?

Un rostro bonito y cuerpo bonito. Eso no hace sentir bien a Jin, porque lo último que hubiese querido es atraer la atención de ese maldito sujeto. Ni siquiera sabe cómo empezó aquello, ahora se arrepiente mucho, porque debió haberse quedado en la habitación donde fue encerrado en la cueva, Namjoon le había advertido que Jungkook no quería que él saliera.

¿Por qué no hizo caso? De ser así, jamás se había topado a Choi Doyun, jamás hubiese sido obligado a parir y su madre no habría caído en el ojo del huracán. ¿Por qué no hice caso? Sigue repitiendo su mente una y otra vez.

Era horrible la sensación de arrepentimiento que cabía en su mente, de algo que siempre se va arrepentir es de haberse topado con Doyun.

Es algo que va a lamentar el resto de su vida.

Salió del baño sin soltar la toalla, apenas tenía una camiseta blanca y unos pantalones cortos, no puede usar ropa interior porque Jungkook no se lo permite. Planea recostarse un poco e intentar dormir, lo que suele ser una tarea difícil para él.

Se sentó en la cama y antes de poder respirar con algo de tranquilidad, la puerta fue abierta con fuerza que falto demasiado poco para que pueda ser derribada, tres tipos encapuchados ingresan, dos de ellos con una soga gruesa. SeokJin se puso de pie y comenzó a caminar con lentitud hacía atrás mientras veía a ellos acercarse a paso lento.

—Quieto borreguito que los señores quieren cenar.

Jin se mueve con rapidez intentando llegar al baño, pero como un deja vu de su desgracia, es tomado entre ambos tipos que lo dan vuelta y uno de ellos lo golpea con fuerza en el rostro ocasionando dolor y mareo.

Aprovechando el momento de debilidad de Jin, el otro lo tomo de ambas manos y aunque SeokJin intentó poner resistencia, el tercero se encargó de tirarle con fuerza de sus cabellos para ponerlo de rodillas y permitirles accesibilidad para atarlo de las manos y pies.

¿Cuántas veces había gritado y llorado para que lo dejen en paz? Ahora ya no lo hace, suenan quejidos de dolor y lágrimas pero no súplicas.

Es atado y sujetado con fuerza como si se tratase de un animal y no de una persona que ningún daño les ha hecho a ellos.

—¿Y Jungkook...? —susurra con la voz quebrada hacía los hombres queriendo saber cómo es que no está allí.

—Guarda silencio —lo mandan a callarse y como nunca Jin baja la cabeza no queriendo que vean como caen sus lágrimas.

Lo obligan a caminar y lo hace porque está acostumbrado a caminar sobre mierda que le va a doler, está hecho de hierro de alguna manera porque es imposible que atravesando tantas peleas, aún guarde esperanzas que podrá con ello, porque es un Kim, porque un Jung y porque lo han preparado para soportar hasta la más mínima cosa que se le venga encima, le queda confiar en sí mismo una vez más y volver a tratar de salir con vida.

Aplana los labios cuando es llevado al mismo lugar donde Jungkook lo torturó por primera vez y no dice nada, no habla nada, porque debe aguantar.

Bastó ingresar con mucho miedo para ver a uno de sus verdugos de pie.

Millions | KookJin +18 LIBRO #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora