Una semana con Duki en una casa frente al mar, era perfecto. Y seria perfecto si no estuvieran Nicole y Enzo no me mal entiendan yo solo quería estar sola con él.—Emi, vamos a ir dar una vuelta por la ciudad. —dice Nicki.
—Pásenla bien. —respondo aplicándome la crema solar y preparándome para ir a tomar el sol.
El sonido de la puerta cerrandose me aviso que se habían ido. Y me volvi a sumergir en mis pensamientos.
La idea de lo que venimos siendo yo y Mauro en las ultimas semanas acecha mi mente, nos besamos algunas veces y me daba miedo empezar a sentir algo.
Agua salpicándome en la cara me distrae y hace que mire desde donde vino esa salpicada, ahí lo veo riéndose de la situación.
—Sos un pelotudo. —ataco y el ríe mas.
Me levanto y me meto al agua con él.
—Pensaba que os habíais ido. —murmuro cerca de él.
—Ellos sí, yo quería estar con vos.
Me quede muda de repente. ¿Se queria quedar conmigo? Lo único que me salió fue sonreírle.
Un grito nos saco de ese silencio cómodo que se había creado.
—¡Nicole se encontro con Trueno y le sonrio! —grito Enzo.
—Que pelotuda que es, ¿donde está?
—preguntó.—Esta confundida creo, esta en la cocina.
Enzo vuelve a entrar y yo salgo de la pileta.
—Emi. —dice Mauro y yo le miro. —Deja a Nicki, ahora estas conmigo.
—Tengo que hablar con ella, sabes lo mal que se pone cuando se encuentra con Matu.
—¿Le llamas Matu a Trueno? —pregunta mientras sale de la pileta y se pone a mi lado.
Un escalofrío recorre todo mi cuerpo.
—Hace frio. —digo cambiando de tema.
—Tomá. —nos envuelve a ambos con la misma toalla.
—No hace falta Mau. —digo saliéndome de la toalla y dirigiéndome hacia la cocina donde Nicole.
(...)
La noche llega, y mi primer plan para "Conquistar a Emilia" había sido un fracaso entonces iriamos al Plan B.
Entramos al Boliche y para mi mala suerte, Lola, aquella mina con la que estuve un buen de tiempo y me marco tanto estaba allí.
Nicole sabía quien era y nada mas verla me miro asustada. Y no se si era para advertirme o porque ya me estaba empezando a encontrar mal.
La rubia se estaba acercando a nuestro grupo y al ver su vestido aquella canción empezo a resonar por mi mente "El blanco te queda tan bien".
—¡Mau! —dice super cerca de mi y yo solo la saludo con la cabeza.
Me empiezo a poner nervioso cuando me abraza, no crean que es nerviosismo de que me gusta, si no que me pone mal ella me cago con un pibe y me habla como si nada.
La mirada penetrante de Emilia me saca de mis pensamientos, ¿estaba celosa?, sonrió mirándole aunque ella no parece darse cuenta.
—Lola cuanto tiempo. —pronuncio con una voz algo ronca.
—Sí, tenemos que ponernos al día gordi.
¿Me estaba haciendo mal? sí, pero tan solo con ver la cara de Emilia me servía.
El problema es cuando su mirada a parte de ser celosa paso a una de ira.—¿Podes dejarnos disfrutar en paz?
—pregunta Emilia.—¿Perdón? —pregunta Lola.
—Me parece piola que saludes a tu amigo y lo que vos quieras pero flaca llevas quince minutos abrazándolo.
—No es mi amigo, es mi ex. —suelta Lola y Emilia se sorprende mira mi tatuaje que pone Lola y después la ve a ella.
—¿Vos sos Lola?
Lola asiente y Emilia se va.
—Dale como podés ser tan pelotudo.
—grita Nicole.—Se enojo ella. —me justifico.
—Porque le gustas, por eso se puso celosa pero que va a hacer si tenés a la pibita tatuada y te abraza así.
Vale, la había cagado un poco.
Me separo de Lola y voy a buscar a Emilia que estaba afuera del Boliche.
—¡Dejame! —grita ella y yo veo lo que pasa, un pibe estaba agarrandola.
Me acerco sin decir nada y agarro al pibe por detrás haciendo que la suelte.
—Fuera. —le grito y el pibe se va.
—Gato a vos tampoco te quiero cerca.
—grita Emilia al verme.—No me grites Emi.
—Si queres te sonrió.
—No tenés que comportarte así, somos amigos... Además vos fuiste la que me rechazo a la tarde.
—¿Seguis con eso? fue una toalla Mauro.
—No te enojes.
—No estoy enojada.
—Sabes que sos mucho mas importante para mi vos que esa gila. —digo y ella no dice nada, yo la apego a mi y la siento sobre mis piernas mientras nos miramos.
—Escúchame, cuando veo a Lola me pongo mal porque me cago con un pibe hace muchos años, el tatuaje lo conservo porque me parece una pelotudez borrarlo ademas lo tengo con lineas rojas como si estuviese dañado.—¿Si te pone mal porque te dejaste estar así con ella? —cuestiona indignada y yo suelto una risita.
—Sos una celosa Emi y eso era lo que quería conseguir para que me dieras bola.
—Dios sos un boludo. —dice y se acomoda en mi pecho.
—Funciono al menos. —digo acariciando su cabello.
—Hace frio...
—¿Si te pongo mi remera me la vas a negar?
Niega con la cabeza y la levanto un poco para poder sacarmela y darsela. Sonríe y se vuelve a apoyar en mi pecho.
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Entre notas y suspiros | Duki&Emilia
FanfictionEstoy como para gritarle al mundo que te quiero.