☀️ DALIAH ☀️
El techo era techo. Era algo encima de nuestras cabezas construido para que el cielo, sostenido por la atmósfera no nos cayera encima. Miles de teorías primitivas llegaron a mi mente.
Eso pasa por tomar trago.
¿Y si todo era una simulación? ¿Y si no existía? ¿Y si era parte de un libro en una plataforma de internet escrita por una autora de mentalidad y estabilidad cuestionable que aprovecha cada emoción suya para desquitarse con nosotros y agrega gente real para hacerla sufrir en la ficción, sin oficio ni dinero, que no tiene idea qué hacer con su vida y teme terminar como Rory Gilmore?
Vuelve a tu mundo, corazón.
–Oye, Daliah– Zara, a mi lado izquierdo, interrumpió mis pensamientos, también mirando el techo de mi cuarto acostada en mi cama, desde hace tres horas al igual que Tiffany y yo–. ¿En tu casa no desayunan? Tengo hambre.
Alguien tocó la puerta.
Como una, las tres agarramos mis sábana para arroparnos. Al tercer toque, la puerta se abrió y solo escuchamos la voz de Nick.
–¿No se van a levantar?
–No– contestamos al tiempo.
–Son las diez de la mañana, niñas.
–Y es sábado.
–Ya está el desayuno.
–Estámos bien.
–No se pueden quedar ahí acostadas toda la vida.
–Sí podemos.
La escuché caminar. Acto seguido, las tres chillamos cuando nos quitó la sabana de encima.
–Dylan tiene razón, es verdad que comparten neurona– cogimos mis almohadas para taparnos y seguir acostadas boca abajo–. Salgan de ahí.
–No.
–¿Es que se armaron un corito?– Preguntó al ver que seguíamos hablando al tiempo.
–No.
–Salgan a desayunar.
–No.
Soltó un bufido. Esperamos unos segundos cuando escuchamos la puerta cerrarse para volver a arroparnos.
–¿Cómo les trata la resaca?– Nos preguntó Zara.
–Las quiero cambiar– confesé.
–Me voy a morir– Tiffany nos miró con terror.
–Expliquen.
Primero miramos a Tiffany.
–Besé a un viejo borracha.
–¿Un viejo?– Preguntamos Zara y yo al tiempo.
–Bueno, no viejo, viejo. Mayor.
–¿Tiene plata?
–Sí.
–¿Estrato?
–Cinco.
Qué decepción.
–No, mi amor– negó Zara–. Está por debajo de tí.
–Con pobres no– Zara me miró mal–. A excepción de futuros millonarios.
–Bueno, es que sí es estrato seis– continuó Tiffany–, pero más bien son sus padres. Por cuenta propia, estrato cinco.
–Ah, así sí está bien– aprove.
![](https://img.wattpad.com/cover/353789119-288-k259143.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Una Vez Más - Belle
Lãng mạnEl inicio que marcó el fin de una vida. Después de años viviendo en Barranquilla, Marc se ve obligado a mudarse hasta la capital para enterrar antiguos fantasmas, pero la situación se vuelve complicada cuando inicia una rivalidad con su compañera y...