MI NOVIO NO ES HUMANO (1)

5.4 ODA A LA MUERTE

Aren dijo que la comida de Bolachi fue bendecida por el Santo Señor.

Escuchó el ruido en el restaurante y se apresuró a entrar, con el delantal todavía atado al cuello, "Padre, usted... Obispo, ¿qué está haciendo?"

Huai Shan retiró su mano del rostro de Shang Nan y todavía tenía lágrimas cálidas en las yemas de sus dedos. No había llorado en muchos años, pero había visto llorar a muchas personas. La mayoría de las personas derraman lágrimas antes de morir. o miedo, o remordimiento, se ven feos cuando lloran, ni un cabello del cura se puede comparar.

El rebelde protagonista miró al inquieto Aren y dijo: "La comida que preparaste es tan desagradable que incluso hizo llorar al sacerdote. Por favor, confiesa tu incompetencia al Santo Señor, realiza el sacrificio".

El todavía joven A-Ren parecía abatido, y el arzobispo Huaishan que lo había castigado y educado hacía mucho que se había ido.

En la sala vacía, Aren le preguntó a Shang Nan con amargura: "Padre, ¿está realmente delicioso?".

Aunque el arzobispo Huaishan se llevó la comida, no importó porque estaba sirviendo al sacerdote y la comida frente al sacerdote estaba casi intacta. Aren estaba muy preocupado porque el trabajo de ser sacerdote no era fácil de conseguir, además tenía una esposa embarazada y una madre frágil que cuidar, necesitaba este salario y la bendición del Santo Señor.

Shang Nan se secó las lágrimas de la cara con el dorso de la mano, "No, solo le falta un poco de sal. Puedes intentar agregar más la próxima vez".

"Está bien" Aren ya no usó las palabras del Santo Señor para explicar por qué había menos sal, porque el Santo Señor no le pagó un salario.

Aren regresó ansiosamente a la cocina y Shang Nan continuó almorzando bajo la luz y las sombras de la tarde.

【14: Él es tan malo, Padre, ¿no lo cree?】

Shang Nan mordió el maíz, "¿Qué significa darle el último bocado de comida a la persona que más amas?"

【14:... Literalmente, esto es lo que leí en la Sinopsis del Santo Obispo, pero no sé si esto se aplica al Dios de la Muerte mismo.】

"Me inclino más a pensar que solo quiere hacerme daño", recordó Shang Nan en ese momento los ojos de Huaishan, escarlata y emocionados, como una bestia en una jaula que ve un conejo o un ratón de campo que estaba a punto de ser alimentado. pero no es un conejo ni un ratón de campo, es un sacerdote, Huai Shan también lo sabe, pero eso no afecta la mirada de Huai Shan hacia el sacerdote.

Es un sacerdote, un hijo del Santo Señor. Si Malivi estuviera presente, definitivamente lo diría indignado.

Malivi no sabía lo que estaba pasando en el restaurante, estaba cenando en el pequeño restaurante con los diáconos.

"Diácono", preguntó con curiosidad un diácono llamado Ah He, "¿sabe por qué el obispo Huaishan ha estado visitando al sacerdote con tanta frecuencia recientemente?"

Malivi mordió ferozmente una pierna de conejo asada, "Quién sabe, tal vez esté reprimiendo algunos malos pensamientos y esté celoso del hermoso cabello largo y blanco de nuestro sacerdote".

Ah, Él y sus compañeros sintieron que lo que dijo el diácono Malivi era correcto: "¿Por qué el arzobispo Gurney no lleva al obispo Huaishan al palacio? Es mucho más interesante allí que afuera, y habrá muchas sirvientas para servirle".

"No hay bares ni casinos en el palacio, así que, por supuesto, él no irá allí".

"Estoy realmente preocupado de que el obispo Huaishan le cause problemas a nuestro sacerdote. El sacerdote es el mejor sacerdote de Santa María", dijo Ah.