Cap 19/

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El Alfa caminaba por los pasillos, sus pasos hacían eco por las paredes y los empleados que pasaban por su lado le brindaban una reverencia

Al llegar a una puerta la golpeó levemente y espero respuesta algún, al recibirla se adentró a la habitación y se acercó al individuo sentado cerca de la ventana

Tsukaku- Giyu, hermano te extrañé tanto

Con una sonrisa llena de primor alzó sus brazos hacia Giyu, su mirada perdida choco contra los de su hermana haciendo que sintiera tristeza por él

Giyu se acercó a su hermana y se arrodilló frente a ella posando su cabeza en el regazo de Omega

Tsukaku- ¿Por qué estás tan mal?

Con sus finos dedos acariciaba el cabello de Giyu, noto lo vulnerable que se veía y parecía perder la esperanza, ese no era el Giyu que conocía

Giyu- No te lo dije... Pero, tengo un bello Omega, el amor de mi vida

Tsukaku- ¿Un Omega?... ¿Cómo es?

Un pequeño brillo apareció en el rostro de su hermano, un brillo que por un mes no había visto, sonrió con algunas lágrimas en sus ojos, ahora sabía que estaba haciendo algo bien

Giyu- Él... es tan hermoso, parecía una frágil rosa que opacada a las demás. Una luz que brillaba a pesar de todo y tiene una risa como si fuera una melodía... Yo lo amo ... Por no cuidarlo como se debe lo perdí... fue mi culpa

Lágrimas recorrieron por su nariz y mojaban el vestido de su hermana, de pronto sintió como gotas en su cabello empezaron a caer, al mirar hacia arriba se dio cuenta de una mueca de arrepentimiento y tristeza que mostraba Tsukaku

Tsukaku- (Si tan solo no hubiera nacido...)

Las manos de Giyu limpiaron las lágrimas de la Omega mostrando una sonrisa de cariño

Giyu- Lo siento. Te hizo llorar, no debí contarte cosas tristes

Tsukaku- No, está bien que me cuentes tus cosas, somos hermanos... A decir verdad, ya lo sabía

El Alfa se sorprendió un poco, pero luego le dio un beso en la frente de Tsukaku, sentía un cálido cariño desde su hermana

Tsukaku- Y-Yo sé donde está tu Omega …

Las palabras que tanto anhelaba escuchar hizo que un pequeño rayo de esperanza cruzara por su corazón, las pequeñas manos de Tsukaku tocaron el rostro del Alfa para calmarlo

Giyu- ¿Cómo-?

Tsukaku- No hay tiempo, tienes que irte ahora, no te detengas si escuchas algún ruido ...

Saco una hoja de papel de su vestido y lo poso en la mano de su hermano, las lágrimas de su rostro no cesaban y a decir verdad tenía miedo

Giyu- Pero si me voy vas a-

Tsukaku- Confía en mí, hiciste tanto por mí. Mientras que yo solo tenía amigas y me daba la libertad de salir de casa, mi hermano siempre estaba al borde de la muerte, nunca me sentí feliz al saber que algún día te perdería

El Alfa bajo la cabeza, Tsukaku limpio sus propias lágrimas y abrazo fuertemente a su hermano, se sentía tan triste por dejarlo ir así, sabía que nunca más lo volvería a ver y sentir su calor protector, pero no podía seguir estorbaban en la felicidad de Giyu

Tsukaku- Deja darte libertad como lo hiciste conmigo... Confía en mi

Giyu- Siempre confiaré en mi pequeña hermanita

Solo un momento más... [BL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora