La suave brisa entraba por la ventana de el chico con lentes de sol, acompañado de un leve silbido del aire, era un Lunes por la mañana, el peor día de la semana, este mismo iba a levantarse, pero recordó que hoy era día feriado, suerte para el.
El mencionado en vez de hacer algo productivo con su vida por alguna vez, decidió volver a acomodar en su cama, y simplemente acorrucarse nuevamente, intentando volver a reconciliar el sueño, hasta que una grande onda de sonido llegó a sus oídos, soltando un gruñido de molestia.
Por el otro lado, "Papulince" ya estaba más que despierto, su madre había aceptado comprarle una nueva guitarra, y obvio que la iba a estrenar como siempre, conectando todo su equipo y rápidamente tocando una cuerda, fue tan satisfactorio, afinandola de inmediato.
Para el mismo chico no era un problema molestar a sus vecinos en la mañana, todos sabían lo ruidoso que era este, ya no le daban importancia.
"Panafresco" estaba claramente frustrado por esto, tapándose como podía ambos oídos, odiaba demasiado tener de vecino a un guitarrista, preferiría mil veces tener de vecino a un bajista, esos nunca se escuchan nisiquiera al hablar.
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El chico con la sudadera de dos colores había estado probando su guitarra durante las últimas 2 horas, pero por fin se cansó y se recostó en su cama, con la guitarra aún en sus manos.
Mientras tanto, el adolescente con gafas de sol no había dormido nada, y su irritación hacia el otro estaba en su punto máximo. Todo lo que quería era un día libre sin molestias, pero en cambio estaba lidiando con esto. Era verdaderamente frustrante.
El chico con la sudadera de dos colores yacía en su cama con la guitarra aún en sus manos, completamente agotado después de horas de tocar. El opuesto, el adolescente de gafas de sol, no había dormido nada debido a su molesta música.
Su paciencia estaba al límite. Sentía que nunca tendría un día libre sin las constantes prácticas de su compañero. Miró con irritación hacia el edificio de el otro, deseando que se callara de una vez por todas.
El chico con la sudadera de dos colores finalmente se incorporó en su cama, manteniendo la guitarra aún en sus manos. Se levantó y la colocó cuidadosamente a un lado, dándose cuenta de que había pasaba horas tocando sin descanso. Miró hacia la ventana y notó que afuera estaba el sol ya brillando de más, lo que significaba que era hora de salir.
Se levantó con pesadez y se preparo para salir, todavía cansado por la práctica. Miró hacia un espejo para asegurarse de verse presentable antes de salir de su habitación.
—¡Hola cariño!, ¿cómo dormiste tesoro?—Hablaria la mamá de el chico en su tono dulce de siempre.
—Bien, ma, gracias por la guitarra.—El chico diría en un tono cansado, mientras iba a la parte de lavandería a buscar su ropa para salir.
El adolecente estaría buscando entre toda la ropa su sudadera favorita, con la que todos los conocen, pero, no la encontraba.
—¡Maa!, ¿Sabes dónde está mi sudadera?—El chico gritaría un poco para que su mamá lo escuche.
—¡No la e lavado, tesoro!—Respondio la madre.
No sabía que una sudadera le importara demasiado, el chico se quedó estático, para luego soltar un quejido de molestia, optando por usar una sudadera completamente de color negro.
El chico agarraría su patineta y su mochila, en si no tenía pensado a dónde ir, pero una idea le vino a la mente.
Conocía a el famoso "Baiter", que formaba parte de el grupo de "amigos" dónde Pana estaba.
Sabía que Baiter tocaba la batería.
Sin perder tiempo, agarro su teléfono y vio si tenía en contactos a Baiter, y para su sorpresa, ¡Sí lo tenía!, rápidamente sonrió, y decidió llamarlo.
—¿Aloh? ¿Papu?—Diria el adolecente de sudadera.
—Aghhhshs....—Fue lo único que se escuchó en el micrófono de el otro, dejando a el chico completamente confundido.
—Baite-
—¿Quien mierda llama a esta puta hora?—El otro adolescente se quedó en silencio, viendo a su teléfono.
Después, el chico que siempre solía llevar unos pantalones medio holgados, se percató de que no era uno de sus amigos, si no una persona que no le tenia la "confianza" suficiente para hablarle así.
—Mierda, perdón Math-
—Papu, llámame Papu.—Responderia en un tono algo feliz, para luego cambiar de tema.
—Escuche que tocas la batería, ¿verdad?
—Sí, sí la toco, ¿porque, quieres pedirle ayuda al experto?—Hablaria mientras se reía, su tono era un poco somnoliento, apenas se levantaba.
—No, lo digo para por si sales conmigo a-
—¿Una cita? Uff, perdón amigo, no soy gay.—soltó a carcajadas, al ver que el opuesto se había quedado en silencio, se quedó callado, tragando saliva nerviosamente.
—Ah-..Uh-...¿Era bait?—se disculpó así, sus carcajadas se volvieron en cortas risas de nervios.
—Bueno, era para ver si salias conmigo a tocar o algo así, toco la guitarra.
Tan pronto como el baterista escucho eso, rápidamente grito de la emoción, haciendo que el chico se asuste un poco, aceptando y colgandole rápidamente a el otro.
—
Uh-... Eso fue raro.—Murmuraria a si mismo.
Mientras tanto, el baterista estaba más que feliz de finalmente conocer a un guitarrista que le ofreciera tocar con el, básicamente lo había esperado toda su vida, también era una nueva oportunidad para acercarse más a Papu, ya que igual, a su vista, el chico era demasiado "cool" para que siquiera le dirigiera la palabra, así que para el, esto era un logro.
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HOLAAA, perdón si es muy corto, es de madrugada y me dieron ganas de actualizar, pero mañana lamentablemente me tengo que despertar temprano.
Anyway, aki su comida, agradezcanme malditos desgraciados ☹️☹️/JK
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i'm not your boyfriend! (Papulince x Panafresco)
RandomPapulince, un fiel seguidor de la grasa, quien al entrar a la escuela, se encuentra con alguien que le llama la atención, ese alguien es un tal "Panafresco", Papulince hace de todo para que panafresco sea su amigo, Panafresco de vez en cuando lo ace...