El Esclavo Más Fuerte | Mato Seihei no Slave

Capitulo 4: La Chantajista

Actualmente, Gojo se encontraba limpiando la torre de vigilancia de la base.

—Que aburrido, esperaba más diversión que en la academia, pero ahora me la paso haciendo como un empleado, mi vida no puede ser más triste.— Decía el peliblanco mientras lloraba comicamente.

A lo lejos, en las aguas termales de la base, Himari se encontraba dándose un baño completamente desnuda, la chica se percató de una mirada pero Satoru rápidamente se ocultó.

—Ok, cuando hablaba de cosas emocionantes no me refería a eso. Si me descubre esa mocosa intentará castrarme.— Dijo Gojo mientras estaba agachado.

Repentinamente una voz se hizo presente.

—Espia.—

Gojo rápidamente se percató de la presencia de Shushu con los seis ojos por lo que rápidamente la tomó entre sus manos, ya que estaba del tamaño de un insecto.

—Te tengo!— Exclamó Gojo mientras sujetaba a la chica.

—Asi que finalmente mostraste tú verdadera cara eh, Gojo-kun.— Respondió la rubia.

—No sé de qué hablas, aquí la espía eres tú, sé que me espías mientras me ducho.— Dijo Gojo mientras se cruzaba de brazos.

—Fufufu no tienes pruebas, pero yo sí que las tengo.— Respondió la chica mientras le tomaba una foto.

Satoru quedó helado al verse comprometido por aquella foto.

Shushu amenazó a Gojo con darle la evidencia a la comandante, el chico se puso nervioso de que fuera tachado de pervertido.

—Maldicion ¿Planeas chantajearme verdad? ¿Que es lo que quieres?—

La chica nuevamente dió una risita burlona y asintió.

—Si quieres que tú reputación no se manche, entonces tendrás que ser mi esclavo, Satoru Gojo.— Respondió ella.

El hechicero nuevamente se encontraba contra la espada y la pared.

[ POR LA MAÑANA ]

E

n la habitación de Shushu, Satoru estaba recogiendo el desmadre que tenía mientras la chica le hablaba de lo aburrido que eran los mangas románticos.

Shushu luego de un momento pareció haberse quedado dormida por lo que Gojo pensó en tomar su celular y borrar la foto, pero el teléfono estaba entre los pechos de la chica por lo que era un jugada arriesgada.

—No tengo de otra, usaré mi velocidad .— Pensó mientras doblaba la ropa de Shushu.

Satoru iba a tomar el teléfono, pero justo antes de tomarlo ella abrió los ojos por lo que de inmediato tuvo que disimular.

—¿Oh? ¿Que querías hacer eh? Estás tan rojo cómo un tómate Gojo-Kun.— Decía mientras se acercaba al hechicero y le pegaba los pechos.

Gojo se puso nervioso y activó el infinito, haciendo que ella retrocediera.

—Ya terminé. Esto no se quedará así Shushu.— Habló el chico mientras se iba de la habitación.

Shushu dió una sonrisa mientras veía a Gojo irse.

Rato después, el hechicero vió como Kyouka entrenaba a Himari, incluso reconoció que para ser una chica era realmente fuerte, aunque él estába bastante más arriba. De pronto, Nei se hizo presente para darle noticias.

—Pronto saldremos a una reunión, así que te encargarás de cuidar a Shushu en lo que estamos fuera, puedes aprovechar para conocerla mejor.— Dijo la niña con una sonrisa.