No es una propuesta... | LEGADO #2 borrador ✔️

CAPÍTULO 3 🧡

OLIVE

De todas las personas que existen en el mundo. ¿Y de toda la sociedad entera... tiene que ser Colin el que me encuentre en mi momento más vulnerable?

En estos momentos es cuando recuerdo cuan sola estoy. Sí, tengo a Jane la elegí como hermana hace tantos años. Pero ella de alguna manera no es una niña normal... no me malinterpreten es más inteligente que toda su familia junta, pero creo que por esa misma razón su destino está fuera de toda esta sociedad. Ya retraso un año su presentación en sociedad y estoy más que segura de que logrará hacer lo que ha planeado toda su vida. Y eso no incluye la sociedad, ni mucho menos está ciudad.

Entonces sí, estoy sola.

—No puedo estar cerca de ti entiéndelo.—no quiero que mi voz suene así, pero que él esté Justo aquí, que me mire así, tan débil, me duele incluso más que el maltrato y las amenazas de John. ¿Y si cumple su promesa? Si me ve con él. Podría... —te hará daño...
Digo en un susurro esperando que entienda que le será mejor alejarse de mí.

De todas formas no es como si... niego para mis adentros.

Sus manos siguen aferradas a mi cintura, lo peor de todo es que siento que si me suelta tocaré el suelo de nuevo.

Intento levantar mi rostro, de alguna manera demostrarle que no lo necesito, aunque Justo ahora él sea lo más cercano que tengo a una familia. O a un amigo.

Mañana todo esto pasará. Y haré lo que hice para sobrevivir la temporada pasada.
Es la única manera de seguir intentando sacar cada día adelante.

Me encuentro con su mirada, tan oscura y profunda. Ojalá pudiera saber que es lo que piensa de mí en este momento.
Aún que pensándolo mejor, es mejor no saberlo. No está en la mejor etapa de su vida. Lo expulsaron de la universidad tiene muchas que resolver de su propia vida.

Abro la boca, pero el habla primero...

—Claro que puedes, Oli. Y lo harás, desde hoy y por el resto de tu vida... porque te vas a casar conmigo.

Estoy segura de que no escuche correctamente.

Por alguna extraña razón escuché que hablaba de matrimonio... y eso es completamente imposible ¿verdad?

—creo que te estás confundiendo. Yo me tengo que ir... —logro estabilizar mis piernas, ya no tiemblan por el miedo. Ahora es por una razón completamente diferente, pero estoy segura de que puedo con eso.

Empiezo a caminar, pero ahora la mano de Colin me toma por el brazo. Inmovilizándome en mi lugar.

—Colin que...

—no huyas de mi Oli. Conmigo estás a salvo. Nadie se atreverá a hacerte daño, ni siquiera podrán mirar en tu dirección sin ser objeto de mi ira. —dice cada palabra con tanta fuerza y determinación, que de verdad me cuesta creer que el mismo Colin que conozco desde hace años, el Colin que me arrojo al lago en su casa de campo, el Colin que se burló de mí y me hizo enojar más veces de las que puedo recordar. Sea este hombre que tengo frente a mí. Protector y valiente, como un príncipe de cuento de hadas.

Pero todos incluida yo sabemos que Colin es todo menos un príncipe azul...

No. Su color no es el azul, su color es el gris... el equilibrio entre lo bueno y lo malo. Entre lo oscuro y la luz. Colin es gris.

"And gray is my favorite color"

—No estoy huyendo, —me aclaro la garganta y niego viéndolo a los ojos. —es solo que de verdad tengo que irme.