Leyendo En vuelo

Leyendo: Trigésima Primer Ala

Uzume tomó el libro ansiosamente

Bien, este sería el capítulo decisivo, ahora vería si podían o no podían curar a su chiho

Todo saldría bien, si todo saldría bien

Esperaba

Ojalá

Por favor

"Bienvenido a casa", fue lo primero que escuchamos cuando finalmente regresamos a la Casa Izumo. Miya nos sonrió amablemente a los cinco mientras avanzábamos arrastrando los pies por la puerta principal hacia el pequeño vestíbulo al principio de la posada. "¿Todo salió bien, Uzume-chan?"

"Bueno mi ashikabi está noqueada con magia que no tenemos idea de cómo funciona y ahora está apunto de ser tratada por un mago malvado usando un artefacto de cuento de hadas, así que más o menos?" Uzume respondió

"Shirou no es malvado!" Chiho regañó a uzume con un puchero

Era un buen hombre!

Solo un poco violento

No estaba muy seguro de cómo era que Miya ya sabía sobre nuestro viaje inesperado, pero supongo que no debería sorprenderme. No era como si hubiéramos estado particularmente callados o sutiles cuando nos íbamos esa noche. Además, Miya de alguna manera siempre parecía saber todo lo que estaba pasando en su posada. No estaba segura de si esa era una característica suya que se originó de su pasado como no humana o si era algo que se había desarrollado después de haber sido casera durante tanto tiempo.

"Fufufu, una dama debe guardar sus secretos" Miya se burló poniendo un dedo en sus labios

Lo bueno de ser tan sobrenaturalmente buena en todo es que nadie sospechaba de los trucos mas mundanos

De cualquier manera, a pesar de que el cielo apenas comenzaba a aclararse con los primeros rastros del amanecer, Miya parecía tan imperturbable y serena como si acabara de salir de la cocina. Llevaba su delantal de estilo antiguo sobre su ropa del santuario, y sus ojos estaban arrugados en su alegría habitual.

"Hola, Miya", Uzume le devolvió el saludo a la dueña, con una sonrisa torcida en su rostro. "Perdón por volver tan tarde".

"Si, tuve que recoger un paquete de último minuto" bromeó uzume

"Bueno", Miya resopló levemente, "si bien es bueno ver a un vagabundo como tú saliendo de la casa, ¡es preocupante verte aguantando hasta tan tarde! No sería bueno para la reputación de Izumo si pasaras de ser un ¡un encerrado a ser un delincuente!" A pesar de sus suaves bromas, los ojos de Miya se abrieron con una expresión más estudiosa cuando observó a la figura que aún dormía profundamente mientras estaba acunada en los brazos de Uzume. "¿Así que este es tu Ashikabi largamente ausente, Uzume-chan?"

"Sí", Uzume miró a Chiho con una tierna sonrisa una vez más apareciendo en sus labios. "Esta es mi Chiho".

"La pobrecita debe estar agotada", comentó Miya, notando la forma en que la niña enferma todavía dormía. La dueña chasqueó la lengua levemente. "Quizás cuando se despierte le vendría bien un buen baño y un poco de desayuno".

"No estoy segura de que sea buena idea, si prueba la comida del hermano puede que termine por caer rendida" uzume dijo con preocupación

"Yo jamás haría eso!" Chiho se quejó sonrojada

Aun que bueno, la idea de que Shirou le llevara el desayuno a la cama era...bastante atractiva

"Ah, no te preocupes por eso por ahora", Uzume negó con la cabeza, lo que provocó que Miya parpadeara. "En este momento, Shirou la tiene bajo algunas de sus cosas mágicas oscuras y malvadas de lavado de cerebro. No debería despertarse hasta dentro de un día más o menos".