¡Soy un villano!

capítulo 5

Su suerte nunca fue la mejor, la vida se encargó de que lo recuerde justo esta mañana, apenas empezó el día y ya se ha topado con dos protagonistas.

Además, se ha dado cuenta de que no está cumpliendo con su propósito, se supone que debía mantener bastante distancia de cualquiera relacionado a la historia para poder vivir cómodamente.

En cambio, él se hizo cercano a varios de ellos, incluso Mikey se comporta de manera pegajosa con él.

Mikey fue en el juego el causante de su muerte muchas veces, por eso es un poco raro ver como se porta tan cariñoso con él.

Aún así, sabiendo que incluso Inui y Kokonoi fueron participes de su asesinato en una ruta, él no puede alejarse de ellos pues cuando lo intento no duro ni dos días.

Hay varias razones para eso: Takemichi se ha encariñado con ellos, viven literalmente juntos, Mikey es su prometido,  y al rubio le gusta esa atención.

Esta mañana se ha topado con Mitsuya y Chifuyu, fue un atrevido con el pelilavanda y con el de ojos verdes-azulados tuvo un pequeño asunto.

Siente culpa por esto, pero Takemichi no va a negar que le gusta todo eso, le gusta recibir la atención y el cariño de las personas.

Con Draken no ha tenido tanto acercamiento después de esa pequeña plática, así que siente que va por buen camino. Parece que el más alto no lo odia, solo no son cercanos.

Con Akane no hay tanto problema ya que ella no es parte del harem de Hinata, eso lo hace feliz porque puede acercarse a ella sin sentir que esta firmando su sentencia de muerte.

Agradece tener a Kisaki a su lado, aunque en el juego no se mencioné mucho a este mismo, él sabe por cuenta propia muchas cosas de Kisaki.

Siente que puede confiar en los dos últimos mencionados, pues al no formar parte del harem de la Tachibana no tienen razones para asesinarlo ni nada por el estilo.

Takemichi quiere aprovechar sus lujos tranquilamente, pero no puede ignorar sus propios deseos por la atención de las personas.

En su vida pasada no fue la persona con más atención que digamos, a sus padres les daba igual su existencia y solo tenia a su mejor amiga Aiko, aparte de ella nadie más le prestaba atención.
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—Takemichi.

Esa voz lo saco de sus pensamientos, haciendo que note como el salón está casi vacío debido al sonido de una campana indicando el descanso.

El chico sonríe levemente y se para del asiento, esperaba poder estar con Kisaki en el descanso ya que son buenos amigos.

—Me gustaría pasar el descanso contigo pero me comprometí a ayudarle al maestro de matemáticas—Takemichi entiende eso y asiente sin insistir más, luego se retira del salón para buscar a alguno de sus otros amigos.

Por los pasillos hay mucha gente, él solo se dedica a admirar las bellas flores que puede ver por todo el lugar, estas adornan muy bien aquel edificio.

—¿Ella no es?—Dice en voz bajita, casi nadie pudo escucharlo.

Pelo corto de un color salmón al igual que los ojos, si tiene que destacar algo de ella es el lunar que tiene debajo de los labios, no está sola, a su lado hay un chico azabache con una mirada seria.

El reconoce a ese chico, es el hermano menor de la protagonista: Naoto Tachibana, el responsable de su muerte en la ruta harem.

La presencia de esos hermanos le es tan atractiva a la vista, verlos caminar por ahí es simplemente encantador para Takemichi.