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Quackity estaba demasiado tomado, estaba en aquel lugar llamado "Las cazulonas", pensando en varias cosas, entre ellas, aquellos esposos que dejaban a aquel pato con el corazon a mil, se sentia mal, no queria arruinar una relacion, por ello estaba ahi, demasiado tomado, casi no se podia mantener, por lo que solo se limitaba a estar sentado, sin ver ni pensar en nada mas que sus problemas y estres, el alcohol lo ayudaba a eso, lo ayudaba a olvidar, por eso amaba tomar.

Estaba simplemente viendo a la nada, escuchaba la musica, los gritos que se les daban a aquellas mujeres que bailaban con sensualidad, pero eso no le interesaba, por lo que tomo un trago profundo, ignorando a todos.

-¿Quackity?- Hasta ese momento, levanto su cabeza con pereza, viendo a aquel hombre que en esos momentos no queria ni ver en pintura, Roier -¿Que haces aqui patito?-

-Primera... no me digas asi... segunda, dejame...- Respondia con dificultad, viendo a aquel chico con poco maquillaje todavia en su cara, aquel maquillaje no le quedaba nada mal pensaba Quackity, maldiciendose internamente por ello.

-Estas demasiado borracho, ¿Quieres en serio que te deje aqui a tu suerte?- Pregunto sorprendido Roier al ver la actitud que tomaba Quackity, indefenso, si, pero tambien muy a la defensiva.

-... Callate- Esas palabras de Quackity le importaron poco al hibrido de araña, acercándose a este y levantandolo en tipo nupcial, cosa que al instante Quackity pego con dificultad y pereza en el hombro -Bajame..-

-Nos vamos, no quiero que alguien se llegue a aprovechar de ti en este estado- Esas palabras hicieron que Quackity maldiciera en bajo, amaba ese trato, pero a la vez lo detestaba -Tu tranquilo, yo y Cellbit cuidaremos de ti-

Y como si esas palabras hubieran sido un hechizo para el, dejo de golpear y maldecir, simplemente dejandose cargar y llevar al castillo de aquel par que amaba y odiaba.

No tardaron en llegar, o eso fue lo que sintio Quackity ya que estaba casi inconsiente, dormido en algun punto, solo sintio como el ambiente frio paso a uno calido y acogedor, eso le dio la señal de que ya habian llegado y estaban dentro de aquel castillo.

Se estaba arrepintiendo.



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