8.- Deudas.
El cuerpo me pesa, me molestan los ojos por la luz del día y el sonido del celular hace que la cabeza me duela así que no lo pienso dos veces para apagarlo.
No quiero ver a nadie, no quiero hablar con nadie y es lo que me hace ignorar los golpes de la puerta cuando me dirijo a tomar un vaso de agua. No tengo energía así que termino volviendo a la cama y durmiendo otras horas.
No me siento bien y el que haya dormido todo el día lo demuestra. Es de noche y me levanto para lavar mi cara y termino viéndome más tiempo al espejo detallando mis ojeras y piel pálida, la mirada se va a mis hombros viendo las marcas que a pesar de que ya no están, se encuentran grabadas en mi memoria después de esa carrera.
Me abrazo a mi misma cuando vuelven las ganas de llorar y termino pegando la espalda a la pared para arrastrarme hasta llegar al piso.
Estoy cansada. No quiero seguir con miedo de que un mes cualquiera deba tener que esperar el día en que termine derrumbándome y recordar todo lo que he querido olvidar durante estos años.
Inhalo y exhalo un par de veces para calmarme pero el cuerpo no me da para moverme y me quedo aquí hasta que el cansancio vuelve a ganar y termino dormida.
-Kamille...
Me duele el cuerpo.
-Despierta.
Siento unas manos en mis mejillas.
-Por favor...
Me toman y siento un leve movimiento para luego quedar sobre una superficie suave.
Vuelvo a sentir las manos en mis mejillas e intento abrir los ojos pero me resulta imposible y continuo en el punto en que ya no escucho ni siento nada.
No sé cuánto tiempo pasan, si son horas o minutos simplemente no tengo idea pero la misma voz de antes de hace notar al mismo tiempo en que sostienen mi muñeca.
-Si, el pulso está bien.
Guarda silencio.
-No... Ya recuperó el color en los labios.
Sigue el dolor de espalda y me muevo para acomodarme de lado aplastando ahora mi pobre brazo.
-¡Ya se movió! -Dice más alto dejándome distinguir mejor la voz de Charles-. Si, está despierta.
Siento una mano en mi mejilla.
-Kamille abre los ojos -Susurra y me cuesta hacerle caso pero finalmente lo hago.
De principio lo veo algo borroso pero una vez se aclara mi vista puedo ver una leve sonrisa y la preocupación que expresa su ceño.
-Hola -Digo con voz rasposa.
-Está bien -Dice a la persona al otro lado-. Si, la llamaré si vuelve a ocurrir algo.
¿Con quién habla?
Corta y deja el celular a un lado antes de dirigirme su total atención.
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Light up
Fiksi RemajaKamille era corredora de formula 1, tuvo un accidente en la que se convirtió su última carrera y al no querer volver a conducir consigue un puesto como estratega en un equipo masculino en el que ha trabajando por dos años hasta que descubré la infid...