Al dia siguiente
Yo ya estaba lista para mi primera lección: aprender a disparar. Tenía un poco de nervios, pero en mi mente no dejaba de repetirse la imagen de mi padre muerto, por culpa de ese Benjamín. Mi venganza puede más que todos mis nervios juntos.
-Bien entonces, mirada en el blanco, piernas separadas, relajada, ambas manos en el arma.
Ian me explicaba, pero yo estaba muy concentrada. Solté un disparo y derribé una lata.
-Excelente, creo que no tendré problema contigo. Aprendes rápido o es suerte de principiante.-rió
-Ví a mi padre muchas veces entrar a sus hombres. Intenté memorizarme todo, solo faltaba la práctica.-suspiré-Espero no perder demasiado tiempo.
-Hay tiempo para todo Alma, tranquila. Lo lograremos.
Semanas después
Ya habían pasado algunas semanas. Ian y yo habíamos hecho una cantidad de actividades que aún no entendía en que era relevante para la venganza.
-Bien. Aprender a disparar, paracaidismo, aprender a nadar, arquería, condición física... Hemos avanzado un montón, te felicito.
-Gracias.-sonreí- solamente falta una cosa
-¿Ah si? ¿Y que es exactamente?-pregunto Ian
-Montar.-sonreí emocionada
Nos dirigimos a las caballerizas. 2 cabellos ensillados nos estaban esperando.
-¿Listo?
-Listo.-contestó
Dimos un paseo por toda la hacienda y mientras tanto...
-Realmente eres muy buena montando.
-Tuve al mejor maestro. Tu también eres bueno
-Aprendí hace mucho tiempo. En este mundo hay que saber hacer de todo.
-¿Sabes una cosa Ian? No te he agradecido por todo lo que has hecho por mi. El tiempo que me has dedicado, las cosas que me has enseñado. Mi mundo era Perfecto y nunca imaginé que un día mi vida iba a cambiar por completo y llegar a estar aquí, así, tan dolida y llena de rencor y odio.
-No me tienes que agradecer. Estamos juntos en esto y no te dejaré.
-¿Crees que de verdad lo logremos?
-No lo creo.-negó con la cabeza-Estoy seguro.
-¿Y crees que me puedes ganar una carrera a caballo?
-Eso si no estoy seg...
-Te veo en la meta.-grité mientras mi caballo corría.
Al llegar a las caballerizas
-Hiciste trampa Alma
-Claro que nooo.-dije a carcajadas
Bajó de su caballo. Yo me estaba bajando del mio y tropecé torpemente. Ian se lanzó a atraparme y por suerte lo hizo.
-Ten cuidado.-dijo riendo
Yo reí mientras el me sostenía en sus brazos. Nuestras caras se encontraban muy cerca. La risa fue desapareciendo de a poco y solo escuchábamos la respiración del otro muy cerca. Sus ojos se clavaron en mis labios y los míos se clavaron en sus ojos. No pude evitar bajar la mirada a sus labios. Estaba jadeando, sus labios rosados están entreabiertos. Se estaba acercando lentamente hasta que...
-Alma..
Di un respingo y vi a mi madre parada frente a nosotros con las manos en las caderas. Ian me soltó y yo quité la mirada nerviosa. Reaccioné y abracé a mi madre.
-Mamá, ¿que haces aquí? No sabia que vendrías.
-Fue repentino hija. Intente avisarte, pero no respondiste el celular.
-Disculpa, estaba ocupada. Pero ven vamos a la casa y te ofrezco un tinto.
-Gracias Amor.-dijo
Nos dirigimos a la casa y nos sirvieron el tinto en la terraza.
-Mija, ¿que hay entre Ian y tu?
-No hay nada mamá, solamente me está ayudando con algo, es todo.
-A mi no me pareció ver eso.
-Por Dios mamá, no viste nada.
-Hija, me preocupo por ti. Se que estas enojada y quieres vengar a tu padre, pero no lo hagas. No es la manera y mucho menos con ese muchacho.
-A ver mamá, no entiendo.
-Alma, tú eres una niña bien, de buen corazón. No cometas el error de manchar tus manos de sangre o de manchar tu vida con una persona como Ian.
-¿Perdón?
-Alma, es un traqueto. Hombres así no valen la pena, no quiero que arruine tu vida. Tu tienes una vida perfecta.
-Mamá, ¿te estás escuchando?-señalé uno de mis oídos con mi dedo índice-Ósea vienes tú a hablarme precisamente que no me meta con un traqueto pero tú estabas muy a gusto con la vida que te daba mi papá y su dinero no era precisamente limpio.
-Alma...
-No, Alma nada mamá. ¿Tu crees que yo voy a dejar la muerte de mi papá así? ¿Que el hijueputa que lo mato ande libre como si nada?
-No es tu trabajo.
-¡Si lo es! Porque era mi papá al que mataron horriblemente por una puta venganza. Y si tú, que eras su esposa no piensa hacer nada, yo si. Y si no me quieres apoyar en esto Perfecto. Aunque realmente no te entiendo mami, porque alababas todas las cosas y negocios de mi papá y yo que quiero hacer la que gente que le hizo eso pague. ¿Tu no lo aceptas?
-No quiero que te pase nada Alma, es un mundo muy peligroso.
-También lo era para mi papá y tú nunca le pediste que dejara esta vida de mierda por ti, por nosotras. Porque estoy segura que si se lo hubieras pedido, hubiera dejado todo, todo por ti. Porque te amaba con locura. Como nadie ama en este mundo.
Mi madre se quedó en silencio y me miró.
-No vengas a querer cambiar mi vida mamá, porque yo estoy lo suficientemente grandecita para decidir sobre mi vida amorosa o mi vida en general. Y no me importa perder toda mi carrera por vengar a mi padre, porque el hubiera hecho exactamente lo mismo por ti o por mi.
-No sabes en lo que te estás metiendo, no vas a salir de ahí. No sabes que es tener un novio traqueto que lo único que te va a traer es desgracias a tu vida.
-¿Y tu si, mamá? ¿Si sabes que es estar casada con un traqueto? Mi papá dio todo por ti.
-¿Y de que le sirvió? Si está muerto.
-Lo mataron mamá, como puedes ser tan insensata.
-Alma, yo te advertí. Y mientras tú sigas con tu ridícula venganza, a mi no me busques.
-¿Ridícula? ¿No te importa que el asesino de mi papá esté suelto haciendo de las suyas? No lo puedo creer.
-No quiero seguir con esta conversación Alma. Haz lo que tú quieras con tu vida, pero yo no soy, ni seré parte de esto. Yo si quiero vivir.
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Querida Alma
RomanceAlma Prandi, modelo colombiana con una carrera exitosa y una vida perfecta. Pero en el fondo Alma sentía un vacío, quería más que una vida perfecta, quería sentir adrenalina y experiencias diferentes. Solo que no sabia que al tanto desearlo su vida...