⎾𝗦𝗗𝗨𝗕𝗘²⏌☇ YeonGyu ᵒᵛ

ㅤ꒰◌ ᳣ 𝟬𝟰 : Antojos ◌ ꒱ 𝆬

Oh.. Realmente tengo muchas ganas de comerme una buena pizza familiar ahora mismo...¿Será que me alcanza el tiempo antes de que YeonJun despierte?...aunque su me levanto y no le aviso a dónde voy se volverá loco y podría llamar a la policía...¿Entonces sería una muy buena idea si espero a que el se despierte para poder ir a comer juntos más tarde?, ¡Si!, posiblemente si sea una buena idea, aunque no sé si tenga ganas de salir, a trabajo toda la tarde y llegó casi amaneciendo a casa, por lo que supongo que debe de tener mucho sueño y quiera pasar todo el fin de semana en casa...

BeomGyu suspiró con suma frustración después de haber tenido esa pequeña conversación consigo mismo, llegando justamente al mismo punto en el que estaba antes, no sabía cómo se suponía que llegaría a comer aquello que tanto se le había comenzando a antojar aquel medio día, ¡Había cenado hace algunos instantes antes pero sentía que ningúna comida podría llegar a ser lo suficientemente buena como para llegar a llenar totalmente aquel enorme vacío que sentía dentro de su estómago!, el quería una pizza, pero no cualquiera, una grande, familiar, con mucho queso, ¡Por dios se le estaba haciendo agua la boca y su alfa simplemente no daba el más mínimo indicio de querer despertar en algún momento!, por lo cual simplemente se pudo cruzar de brazos y formar un enorme puchero, tenía tanta hambre eh era capaz de llorar por horas por lo mismo, pero no quería salir de casa sin avisarle de alguna manera a YeonJun, era un alfa dominante después de todo, por lo cual era bastante normal que fuese sumamente sobreprotector consigo, por lo que tendría que esperar que se despierte para poder pedirle lo que tanto quería comer aquel día en cuestión, nunca había sentido tanta necesidad de comer algo en específico, ¡Pero incluso el aquellos momentos sabía exactamente como quería la pizza!, nunca le había tenido que pasar eso antes, por lo que ahora se estaba comenzando a desesperar, por lo que inconscientemente ya había comenzando a lloriquear en voz baja, mientras se frotaba contra la enorme espalda de su alfa, talvez tratando de despertarlo a drede, debido a que no podía esperarlo a que se despertara en lo más mínimo, YeonJun se removió, observando a BeomGyu a penas y se despertó ante el considerable movimiento que recibía por parte de su pequeño beta, el mismo quien lo miro con ojos grandes y brillantes, aquel considerable puchero habiéndose hecho un poco más grande que antes, el alfa solamente pudo observarlo sin entender, debido a que no entendía en lo más mínimo que le sucedía a su amado noviecito en aquella ocasión.

── Tengo hambre Jjunnie, ¿Podrías comprarme una pizza familiar por favor? ── Murmuró BeomGyu ligeramente a la misma vez que formaba un sugerente puchero una vez más, YeonJun sonrió un poco mientras dejaba un besito sobre su frente, se veía tan pequeño y tan necesitado que claramente no le negaría aquella ligera exigencia de su parte, BeomGyu realmente nunca le pedía absolutamente nada, por lo que cada vez que hacía algo como eso se encargaba de complacerlo por completo, asintio mientras sus ojos se cerraban nuevamente, la compraría cuando durmiera un poco más, por qué sinceramente estaba muy cansado como para salir de casa en aquellos momentos, el menor al ver cómo su alfa frente a el se volvía a quedar dormido, pataleo cual niño pequeño a la misma vez en la que se cruzaba de brazos una vez más, provocando que YeonJun abriera los ojos de golpe una vez más ── La quiero ahora, YeonJun Hyung estoy muriendo de hambre, ¡La iré a comprar yo mismo entonces!.

── Amor, no seas un bebé berrinchudo, te dije que te la compraría, no te desesperes ── YeonJun se encargo de besar el puchero sugerente por parte de su menor antes de baje sus manos por la extensión de su espalda hasta poder acariciar un poco su delgada cintura ── Ven conmigo ¿Te gustaría?.

BeomGyu asintio constantemente debido a que no le importaba en lo más mínimo como obtuviese su pizza, solamente quería comerla y finalmente lograr satisfacer aquel inesperado antojo que lo había comenzando a invadir extrañadamente aquella misma mañana