Infierno

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Izuku recordó todos los movimientos que Endeavor se había tomado el tiempo de enseñarle, y pronto, creó una flecha de fuego, la técnica de Endeavor "Flecha Ignífuga", incrustándola en los ojos de la criatura. Había regenerado. Había esperado poder igualar a semejante ser provocando su pérdida de visión, pero no. Esa cosa podía regenerarse a voluntad. Se dio cuenta de que necesitaba ganar tiempo. Alguien tenía que llegar. Los héroes. Los profesores.


Alguien.


Gritando de dolor, la criatura avanzó ciegamente hacia él, e Izuku esquivó, arrojando su cuerpo hacia la izquierda en el suelo de la plaza. Sabía que había sido ruidoso, así que rápidamente corrió en la dirección opuesta. La mano de la criatura chocó contra el suelo en la posición exacta en la que había estado. Sus ojos volvieron a crecer como si no hubieran sido quemados segundos atrás. Rápido, Izuku reaccionó y creó un destello cegador desde sus palmas. La criatura, momentáneamente cegada, atacó en la dirección incorrecta. Movió la mano y pronto había una barrera de fuego entre ellos. La bestia pisó el fuego azul intenso como si nada.


Esta criatura no era humana, aunque debido a su anatomía, en algún momento fue humana, pensó Izuku. Se movía sin inteligencia, sin molestarse en evitar las barreras seguramente dolorosas que Izuku construía... pero también había otra posibilidad.


No sentía dolor en absoluto porque había desarrollado tanta resistencia que este nivel de fuego no significaba nada: ninguno de sus ataques causaría algún efecto si la bestia no sentía ningún dolor. Izuku rodó para esquivar un ataque, la bestia regenerando sus ojos. No podía permitirse pensar en estas cosas. Tenía que funcionar, simplemente porque si no lo hacía, estaría muerto.


Izuku generó llamas desde sus palmas y las disparó al cerebro de la criatura. No causó ningún efecto.


Creó destellos cegadores de luz intensa, obligando a Nomu a tropezar y retorcerse confundido. Sin embargo, para su consternación, Nomu no mostraba signos de angustia o dolor, tal como pensaba. Se hizo evidente que la criatura era inmune a las alteraciones sensoriales causadas por el fuego. Esta revelación le envió un escalofrío por la espalda a Izuku: la criatura era invulnerable.


No quería morir tan joven. Tenía apenas dieciséis años, por el amor de Dios. Sabía que era demasiado joven. No quería dejar este mundo antes de demostrarle a Shouto Todoroki que estaba equivocado, no podía soportar la idea de partir de este mundo sin romper las barreras emocionales de Todoroki y forjar una conexión como amigos, para terminar con esta absurda rivalidad que Endeavor les había impuesto. Se le vino a la mente la sonrisa acogedora de Uraraka cuando se volvieron a encontrar en el aula.


No quería dejarlos atrás.


Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos por esquivar a la criatura cegada, Nomu agarró a Izuku antes de que pudiera escapar del peligro. El implacable agarre de Nomu se apretó a su alrededor, mostrando la determinación de la criatura incluso ante la desorientación.


Izuku prendió todo su cuerpo en llamas, pero fue en vano. La criatura ni siquiera se inmutó ante el intenso calor.


"¡Midoriya!" una voz familiar gritó en pánico, y pronto los brazos de la bestia estaban envueltos en escarcha, permitiendo que Izuku escapara de su agarre. El aire crujía de tensión mientras Shouto e Izuku enfrentaban al amenazador Nomu, su forma monstruosa lista para una batalla a muerte. Las llamas danzaban alrededor de la figura determinada de Izuku, sus poderes ígneos listos para enfrentarse con la abominación ante él. Shouto se mantuvo firme, el contraste de sus poderes de hielo y fuego creando un aura de poder controlado.

Fuego Interior (TODODEKU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora