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La lluvia cae veloz mente durante la noche, no puedo dormir o mejor dicho no quiero. La lluvia me relaja demasiado, estoy estresada estoy días y no sé la razón , me desmaye tres veces esta semana desde la última vez.
Fui al hospital por mis revisiones pero mi sexi doctor no me atendió, tuve que soportar a un chico nuevo que todavía no entendía mucho y no sé decidía por un diagnóstico, para mí suerte llegó una doctora y me revisó y pude irme.
Dijieron que no era nada grave pero posiblemente presente mareos y otros síntomas que serán normales.

Me doy vuelta en la cama buscando una posición más cómoda, tomo mi celular revisando si tengo algún mensaje nuevo. Carlisle me estuvo enviando mensajes durante la semana para preguntarme cómo me encuentro e invitarme a salir. No como una cita, si no más bien un plan de amigos.

Lastimosamente

La lluvia comienza a caer con mayor intensidad, deben ser las 4:00am aproximadamente, las gotas caen fuertemente sobre el techo creando una agradable sintonía.
Muevo la cabeza observando mi desordenada pieza, hace tiempo que no tengo tiempo ni ganas sinceramente, pero siento ese impulso de levantarme y ordenar.

Menos pensamientos y más trabajos

Me destapo y comienzo juntando la ropa que está tirada por todos lados, separo lo que tengo que lavar y lo que puedo guardar para darle aunque sea un solo uso. Vuelvo a tomar asiento en la cama, ya me cansé y no hice nada.

Esta juventud

Me siento como chinito mientras pienso que puedo hacer para matar el tiempo. Es sábado, llueve y papá salió por una emergencia.
¿Y si me escapo?

Está lloviendo muy fuerte, pero no voy a ir muy lejos, solo quiero salir a mojarme un rato y pasear por dónde sea. Me cambio el pijama por unos jeans y un sweeter blanco de lana, arriba me coloco un abrigo negro junto a una ruana que me ato a la cintura y la cubro con el abrigo en caso de necesitaría para cubrirme de la lluvia.
Bajo las escaleras y voy a pasos apurados a la puerta, no me molestó en agarrar un paraguas, no me hará falta. Las primeras gotas caen sobre mi a medida me adentro al exterior, refusilos iluminan el cielo y no puedo evitar arrepentirme de haber salido.

Falta que me caiga un rayo y me muera.

Comienzo a caminar en la oscuridad, no voy ni dos minutos y ya estoy demasiado mojada. Por la lluvia , cochinos.

Voy tan sumida en mis pensamientos que no veo el auto que se acerca en mi dirección cuando esté choca contra mi. Para mí fortuna, el conductor logra frenar segundos antes de que el impacto sea peor, así que solo caigo al suelo golpeándome fuertemente la cabeza y raspandome los brazos.
Estoy desorientada, mi tobillo hizo un ruido raro al caer, y no puedo mover el pie. Me siento desorientada y la lluvia comienza a caer con mayor intensidad provocando que me ahogue un poco.

_¡Ay por dios! - Taylor de baja de su camioneta y se acerca a mí preocupado - dime que estás bien Sabrina.

Él me carga al estilo princesa mientras me adentra a su camioneta.

_¿A dónde me llevas?

Mi cabeza duele, estoy mareada y creo que voy a vomitar. Y como si fuera poco, creo que en doble el tobillo al caer.

_al hospital - está preocupado - ¡Dios! Todo esto es mi culpa ¡Pude haberte matado! Perdóname Sabrina, no era mi intención.

Asiento como puedo.

_solo procura que lleguemos vivos al hospital.

Pasan los minutos y cada vez tengo más sueño, pero la idea de que mi padre está en el hospital, sobre todo en urgencias me paraliza. ¿Que hubiera pasado si Taylor no se detenía? Podría haber muerto y todo por mi capricho.
El chico a mi lado estuvo todo el camino disculpándose y sintiéndose culpable, nunca había hablado mucho con él en la escuela, solo algunas palabras de vez en cuando. Pero sin duda es un chico que siente demasiado.

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