Beautiful Flowers (Tomjake)

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Pasaron unos días antes de la gran desgracia, uno que desataría un enorme escándalo para los del equipo magenta. Para algunos no será de mayor importancia, pero puede ser que para otros si lo sea. Alguien había tomado una foto de Tom con Aiden en el bosque,¿besándose?, no había duda alguna de que eran ellos dos. Esa imagen les llegó a través de una carta que le advertía a Jake que Tom solo lo usaba por diversión y que este disfrutaba de ver su sufrimiento. James no quería que fuera real, se decía así mismo que todo esto era un malentendido y que Aiden jamás le haría eso.

-¡Abre los ojos, esta claro que nos engañaron a los dos con sus mentiras!- él peliazul estaba molesto con la noticia.

-Esto es imposible, él no es capaz de hacerme algo como eso, tú no lo conoces como yo- trataba de mantenerse fiel a su palabra, pero a quien engañaba si la foto no lucía para nada una mentira -Esto debe ser una equivocación, estoy seguro de eso-

-Entiende, las personas pueden aparentar ser algo para después demostrar como son en realidad- él más que nadie sabía lo que se sentía eso, más de una sola vez fue traicionado y manipulado por personas que creyó que eran buenas, sin embargo eran lo contrario a la palabra.

-No involucres tus problemas con los míos, no es mi culpa que tu ex novio no te haya dejado las cosas en claro-

-¡No te metas con lo que no sepas!-

Seguirían discutiendo si no hubiera sido porque los demás integrantes del grupo los calmaron, ya que si seguían en esa dinámica podrían perder. James sentía pena por todo lo que le ocurría Jake en este último tiempo, pero no le agradaba para nada que hablara de Aiden de esa manera, que lo tachara de infiel o desleal.

-Oigan, ya cálmense, si siguen así no podremos ganar otro desafío. Somos un equipo y debemos mantener un ambiente acorde para no tener incomodidades o conflictos de este tipo que nos generen algún obstáculo- les decía Ally, comprendía ambas partes, pero esa pelea podría costarles mucho sino la detenía.

El estado de Jake es peor que el de antes, cada vez más pálido y delgado, sin embargo Tom seguía en desconocimiento de la rara enfermedad que este padecía. Con la novedad de esa carta ahora su dolor será más que el de antes, tendría un corazón roto aparte de tener esas raíces que desprendían de este.

El peliazul sabía que no le quedaba más tiempo, ya que ahora no podía ni comer de tanto dolor que sentía en su garganta. Puede ser que Tom no habrá sido su primer novio, pero si su último, por más que intente odiarlo y olvidarse de él le es imposible, un sentimiento fuerte siempre será vencedor de sus pensamientos. Tom ya no era su novio, él pelinegro no le debía fidelidad, así que podría hacer lo que quisiera, sin embargo, para Jake era una realidad que siempre le costara aceptar.

De todas las personas que pudo haberse enamorado, ¿por qué tenía que ser justamente de Tom?, maldecía a su corazón por haber provocado esos sentimientos. El de cabellos azules decidido a confesarle de una vez por todas lo que pensaba y lo que le ocurría durante este tiempo se fue del sitio, los demás lo siguieron para asegurarse de que no se alterara.

-¡Tom!, se que estás aquí, así que sal en este instante- estaba cansado de todo, harto de las mentiras del pelinegro.

Adentro de la tienda del equipo cian se escuchaban unos murmullos, no podía entender de lo que hablaban, pero logró reconocer que estaba Aiden allí dentro. Sin avisar entro a la tienda, ahí encontró a Tom, ¿llorando?, no tenía idea de lo que le ocurría.

-Necesito que hablemos ahora- quería dejar en claro todo lo que pasaba.

-Si, ya voy, esperame afuera- el peliazul salió de la carpa para esperarlo tal como este indicio. Tom se secaba las lágrimas para luego dejar la tienda.