🌺~•°.。♡ Angel Dust ♡。.°•~🌺
Estaba corriendo lo más rápido que podía, respirando con dificultad mientras cubría uno de mis ojos... No quería que le cayera sangre, sí pasaba eso no podría ver bien.
Intentaba huir de Valentino, pues solo podía escuchar sus gritos a lo lejos de que cada vez se acercaba más y más hacia mí cada vez más rápido.
Estaba comenzando a cansarme de más, estaba intentando subir las escaleras hacia mi antiguo cuarto. Quisiera poder tomar el ascensor, pero sí lo hacía me atraparían incluso aún más rápido de lo que podría hacerlo ahora.
Abrí la puerta y la cerré con seguro, comenzando a quitar todo aparato electrónico con rapidez para evitar que se involucrara Vox, para evitar que el problema empeorará.
Junte todos los aparatos electrónicos y los arroje por la pequeña terraza que tenía en mi antiguo cuarto el cual parecía estar igual que como lo había dejado hace tiempo, incluso se miraba limpio.
- Angel cake~- Escuche su voz, inundandose mi cuarto con ese humo rojo.
La desesperación y adrenalina se apoderaba cada vez aún más de mí. Intentaba mantener la calma, pero las lágrimas salían sin cesar y cada vez eran más.
Puse unos muebles sobre la puerta, recargadome sobre ellos mientras tapaba mis oídos con fuerza aún temblando, haciendo el intento de pensar que todo esto no era más que un simple sueño y ya.
Estaba comenzando a calmarme un poco, pero mi sangre gelo completamente cuando escuché a Valentino hablar detrás de la puerta...
Angel, no me dejes
Dijiste que me amarías por siempreEscuche como encajo sus uñas en la puerta después se decir eso.
Cariño creeme
Tendré tu corazón en una bandeja de plata
Podrías recordar:
Tenemos una pequeña empresa familiar
Y a la familia no le gustará~Dio un golpe sobre la puerta antes de continuar.
Te reventaran las rodillas
Toco la puerta con el mismo ritmo.
Te reventaran las rodillas~
Siguió tocando la puerta con ritmo, pero por un momento se detuvo...
- Angel, querido... No quieres hacerme enojar, ¿Cierto?- Pregunto con su voz pasivo agresiva... Estaba realmente enojado.
Por mi parte no respondí, ni siquiera salían palabras de mi boca por el miedo que sentía en esos momentos, pero Valentino pareció no entenderlo.
- Angel, mi amor... Tú dijiste que me amabas, ¿Cierto? Firmaste ese contrato y dijiste que me amarías por siempre, dijiste que estarías conmigo para siempre, ¡¿Por qué mierdas huyes de mí?!-
Estaba destinado a ser tuyo...
¡Estábamos destinados a ser uno!
No puedo hacerlo solo...
¡Termina lo que hemos comenzado!
¡Tú estabas destinado a ser MÍO!
¡YO soy TODO lo que necesitas!
¡TÚ ABRISTE MI CORAZÓN!
¡NO PUEDES DEJARME SANGRANDO!