Eduarda trago saliva al escuchar aquello, no tenia la culpa de transformarse en una mujer de grandes tetas, miro a su amigas y cuando Berta quiso decir algo, Melinda se adelantó:
-Tu calva de tetas grandes, puedes enseñarle lo que sea a mi mascota, si por las mañanas la tengo a mi lado....
Patricia asintió con la cabeza:
-Claro, la podemos compartir entre las dos....
Eduarda negó con la cabeza:
-Por favor, chicas, soy un ser humano y no solo un buen y gigantescas tetas....
Melinda asintió con la cabeza:
-Tu Berta, quédate con ella y le ayudas a entrenar o lo que quiera hacer la calva...
La chica asintió con la cabeza y se miro su escote, comparado con Patricia y Eduarda estaba plana:
-¿Yo? Sí estoy plana.....
Patricia sonrió:
-Con mi entrenamiento pasaras de no ser nada a una talla 100.
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Las grandes tetas de tu vida
Ficção AdolescenteEllas tienen el libro magico y tu un problema