②Shinjuku

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27 de febrero, 7:55 pm:
Se confirma aparición de una maldición de grado especial ■■■■■ encima de Shinjuku.

27 de febrero, 8:07 pm:
la maldición ■■■■■■ desapareció de Shinjuku, no dejó rastros de energía maldita detrás.

27 de febrero, 8:15 pm:
Satoru Gojo confirma la desaparición de 337 mil 556 personas dentro del area residencial de Shinjuku.

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—Que es lo que pretendes Gojo? Ya te he repetido mil veces que no puedes abandonar la escuela

—Dejelo Director, quiere que lo amarren a la silla como en los tiempos de Yaga Sensei

Dijo Utahime en un claro tono burlón

—Acaso te estas burlando de mi princesita?

Dijo Gojo con un extraño tono serio en la voz mientras no dejaba de darle a ambos presentes una mirada desafiante

—Saben lo que pasa? Es que a ustedes dos les importa un carajo lo que le pasa a mi esposa!!

Agregó el albino tratando de no subieron demasiado el tono de voz sin embargo fallando rotundamente en el intento

—Lo único que me.importa en este momento es encontrarla y saber que se encuentra bien...

Ante tal confesión la voz de Gojo se escuchó con una desesperación y ansiedad que era poco común para él.

—Gojo, no es mi intención menospreciar la vida de Shoko...

Dijo tratando de calmar al albino cosa que no le fue posible...

—Sin "peros"!

Respondió casi inmedistamente a lo que sabría que Kusakabe diría

—Gojo!! Acaso no entiendes? Estamos hablando de la desaparición de miles de personas a manos de una maldición desconocida que es capaz de absorver la energía maldita de miles de personas sin dejar algún rastro!! No puedes simplemente lárgate de la escuela así como así

Le gritó Kusakabe, este se había acercado tanto a Gojo como para ser capaz de ahora sostenerlo  de la solapa de su traje, intentando meter razón en aquella cabeza hueca.

—Eso debería ser suficiente para hacerte entender que lo más importante aquí NO es Shoko!

Sus palabras resonaron en su cabeza provocandole una sensacion punzante  aguda en un costado de esta acompañada de un dolor agudo en el pecho
Su sangre estaba hirviendo de ira ante las infames palabras de kusakabe.

Se dejó llevar por la ira y la desesperación que acogían a su ser en ese momento y sin pensarlo dos veces levantó el brazo buscando estrellar su puño en el rostro de Kusakabe, el cual lo soltó de inmediato al ver las intenciones de Satoru y se agachó instintivamente preparado para contrarrestar con su dominio simple.

—Gojo detente!!

Se escucho la voz de Utahime interrumpir la confrontación entre ambos hechiceros, a la par que se interponía entre ambos hombres.
Utahime soltó un pequeño grito, giró su rostro y cuerpo,  encogió sus hombros en preparación de recibir el golpe de Gojo.

Sin embargo, el albino alcanzó a frenar su puño antes de rozar su rostro. El puño quedó suspendido en el aire, temblando por la ira que contenía.

Pocos segundos después su cordura pareció regresar mientras veía a Utahime asustada por su vida, retorciéndose como un gusano a merced de su depredador. Gojo bajo su puño y tragó saliva tratando de calmarse

ᴸᵃ ᴾᵉᵒʳ ᵈᵉ ˡᵃˢ ᴹᵃˡᵈⁱᶜⁱᵒⁿᵉˢ|Jujutsu KaisenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora