¿Obliviate u Olvido?

Capítulo 2. Un nuevo Weasley y un triste adiós.

NARRA HERMIONE.

Había pasado ya una semana desde que Celeste se puso mal, aún estábamos en San Mungo esperando respuestas, según el medimago, algo la había alterado muy fuerte y complicó su salud de por si delicada, pues desde que se embarazó de Hugo había tenido problemas cardíacos, Ron y ella habían decidido no tener más hijos más sin embargo 6 años después del nacimiento del pequeño Hugo, se nos dio la noticia de que esperaban un segundo hijo, ahora estaba en peligro de muerte tanto ella como él bebe.

Ron daba vueltas de un lado para otro en la sala de espera del hospital, Molly y Fleur se habían quedado en la Madriguera cuando a los niños mientras nosotros esperábamos una noticia, Harry y Ginny había ido a el restaurant del hospital para buscar algo de comida, por lo que me que de nuevo sola con Ron y Theo.

-Me estas mareando - dije tomando suavemente la mano de Ron para tranquilizarlo

-El amor de mi vida se ahí adentro muriendo y yo puedo hacer nada - dijo desesperando mientras se tallaba la cara con la mano suelta

-todo estará bien- Lo dije más para mí misma que para él, lo entendía el ver a Celeste tirada en el pasto de la madriguera bañada en sangre me recordó a Draco susurrando que me amaba mientras moría, los recuerdos me invadieron y me paralice, cuando volví a la realidad nos encontrábamos en San Mungo esperando respuestas por parte del medimago, Ron caminó hacia mí y se hecho a los brazos

-No sé qué haré si no se salva - dijo reprimiendo un sollozo, un nudo en la garganta me impidió hablar por lo que solo lo abracé mientras el lloraba, ¿Qué no hubiera dado yo por tener la oportunidad que él tenia? Yo no pensé en nada cuando vi a Draco cubierto de sangre aquella noche en la mansión Malfoy y lo dejé morir, fue mi culpa si al menos hubiera reaccionado a tiempo el estuviera conmigo ahora disfrutando el ver crecer a nuestro hijo.

-No quiero ser inoportuno, pero deberías descansar, Hermi - la dulce voz de Theo me sacó de mis pensamientos y Ron se alejó lentamente de mí.

-Nott, tiene razón - dijo mi mejor amigo limpiándose las lágrimas - mañana trabajas temprano y no has dormido

-no me importa, me quedare contigo - dije tomando la mano de Ron y sonriendo - además, el que necesita descansar eres tú

-no podría, necesito saber qué pasa con Celeste y Rose - Rose era el nombre que habían elegido para la segunda hija de mi mejor amigo

-Me quedó contigo entonces - dije tomándolo de la mano y guiándolo a sentarse - si gustas irte Theo y descansa, nos vemos mañana en la oficina - el chico negó con la cabeza y se sentó a lo lado.

En ese momento el medimago que nos entendió cuando llegamos con Celeste se puso frente a nosotros con cara seria, mi mejor amigo se puso de pie rápidamente y yo lo imite, el medimago dijo unas palabras y puso la mano en el hombro de mi amigo, mi mente viajo rápidamente a él momento en que llegue a la madriguera bañada de la sangre de Draco llorando desesperadamente tal cual lo estaba haciendo mi mejor amigo en este momento.

-.... Lo siento mucho - fue lo único que escuché de parte del médico antes de que diera media vuelta se marchara, Ron se aferró a mi mientras gruesas lágrimas caían por su rostro, quería decir algo darle una palabra de aliento pero no sabía que decir, estaba consciente de lo que el sentía pues yo lo había sentido 11 años atrás y aun dolía como si acabará de pasar, sólo dejé que se aferrara a mí al igual que yo lo hice en su momento, las lágrimas comenzaron a picar mis ojos y no las reprimí, lloré de nuevo acompañando a mi mejor amigo en su dolor y en el mío propio.

No supe exactamente cuánto tiempo estuvimos así, Theo ni siquiera interrumpió, si no que Ron poco a poco se alejó de mí

-Quiero conocerla - dijo mi amigo limpiándose el rostro con la cara