Amor y otras locuras

Telepatía [Agustín/Enzo]

Quién lo diría
Que se podría hacer el amor por telepatía
La luna está llena, mi cama vacía
Lo que yo te haría
Si te tuviera de frente, la mente te la volaría
De noche y de día, de noche y de día

You know I'm just a flight away
If you want it, you can take a private plane
A kilómetros estamos conectando
Y me prendes aunque no me estés tocando

Enzo no entendía como había comenzado todo.

Había convivido cuatro meses con el mismo cast, con los mismos alfas, betas y omegas y nunca había pasado nada entre ellos, nunca hubo un acercamiento íntimo entre él y Agustín Pardella hasta que les dieron unas vacaciones de dos semanas y volvieron a sus países.

Él en Uruguay, el alfa en Buenos Aires.

Sólo entonces habían conectado.

Había sido entre risas, todos habían convenido en que hacer una llamada grupal una noche era una buena idea. Enzo siempre supo que iba a ser un caos terrible y efectivamente lo fue, un caos absoluto y un desastre, pero así eran y así los amaba a todos.

La voz profunda del alfa en llamada no lo había impresionado, no al principio, esa voz la conocía muy bien. Pero no sabía como había acabado por hablar casi en exclusiva solo con él, con la mayoría de miembros del cast retirándose y algo se sintió distinto entre ellos.

La siguiente noche también se llamaron con Kuku, Fran, Juani, Pipe, Matías y Agustín y definitivamente la vibra con el alfa era distinta, mucho más en confianza, las bromas más cercanas. No podía olerlo a esa distancia, por supuesto que no, pero algo le decía que el alfa olía interesado cuando hablaba con él de esa manera.

Sabía que él mismo olía así cuando Agustín bromeaba con él y no sabía muy bien que hacer con esa información.

Entonces, empezaron los mensajes privados, solo de ellos dos, los mensajes por voz, las fotos todo el tiempo. Empezó Agustín, pero él continuó y sabía que no estaba siendo inocente. Estaban claramente coqueteando y le gustaba, pero no sabría como iba a mirarlo a la cara cuando volviesen a verse una semana y media más tarde.

Si Enzo hubiese sabido...

Si hubiese sabido todo lo que llegaría a hacer con el alfa por mensaje, le habría dado mucha más vergüenza pensar en mirarlo a la cara.

***

—¿Qué llevas puesto, precioso?

No se podía creer lo que estaba haciendo.

No sabía como había escalado esa llamada para acabar así, pero aparentemente estaban haciendo algo más que coquetear. Algo así como fantasear el uno con el otro, de forma explícita y en llamada.

—Llevo ropa de deporte —murmuró, avergonzado por lo que estaba haciendo.

—¿Te la vas a quitar para mi, Enzo?

Había algo en la voz del alfa que lo hacía querer ponerse de rodillas y decirle que sí a todo.

—Sí —dijo— pero quiero saber que estás haciendo vos ahora mismo, alfa.

Dos sabían jugar a ese juego y él no iba a ser el único en quedar como un calenturiento. Oyó el jadeo del alfa al otro lado de la línea y sabía bien que era lo que estaba haciendo, pero quería oírselo decir.

—Me estoy tocando, bonito —dijo Agustín— Me estoy tocando para vos.

—Mmmm que alfa más servicial —se burló, aunque en realidad le gustaban los alfas cariñosos, sólo que no había muchos.