Otro día más en este infierno [One-Shot]

675 62 23
                                    

Advertencia: Mención de tortura y comer a cierto perro 🐕 🙃

#

Un chillido agudo invadió el Playhouse.

El pequeño peluche de Catnap pateo lo más fuerte que sus pequeñas patitas le permitieron a la pequeña Hoppy. La coneja se rio mientras se alejaba del gato justo a tiempo antes de recibir el golpe.

El pequeño gatito estaba tranquilamente durmiendo hasta que Hoppy le cayó encima, causándole casi un infarto.

Hoppy siempre se caracterizó por fastidiar a los demás, bueno, la versión de peluche al menos.

Catnap le gruñó, iba a atacarla cuando de uno de los hoyos de su izquierda salio el pequeño perrito de peluche.

Dogday llego con una pequeña pata roja en la boca listo para compartir con su novio, cuando vio a la coneja en su territorio se quedó quieto y miró fijamente a la chica.

Hoppy se estremeció y se alejo a cuatro patas, todos sabían que era mejor no estar en esas colchas que Dogday consideraba su territorio, a menos claro que seas Catnap.

El pequeño perro camino hacia su novio, soltando la pequeña pata roja enfrente del felino, con su hocico empujó la pata más cerca de su pareja, indicando que era un regalo.

El gatito junto su nariz con la del perro en forma de agradecimiento, provocando que la cola del canino se moviera de un lado a otro.

Ambos masticaron la pata de la pequeña osa en un silencio tranquilo y calmante.
Hasta que el pequeño pollo los interrumpió, llegando asustado.

Tanto Catnap como Dogday le gruñeron por arruinar su bonito momento, pero antes de que se le fueran encima al pollo, con gruñidos y sonidos tétricos y escalofriantes Kickin informó de que el Catnap original estaba aquí.

Ambos peluches se estremecieron y siguieron al pollo.

[...]

Justo como Kickin les había informado, en el área principal del playcare estaba un gigante gato púrpura, esperando pacientemente a que todos los mini critters se reunieran, pues ya era hora de que comieran.

A Catnap siempre le había dado miedo la versión más grande de el, bueno, a todos les daba miedo, era enorme, estaba desnutrido (ejemaDogdayleencantansusdelgadashuesudasypequeñascaderas), y su sonrisa siempre era realmente perturbadora.

Además, no era como si pudiesen defenderse en caso de que el gato gigante un dia ya no los considerará utiles.

El pequeño gatito se estremeció.

Valdrían madres el día en que Catnap dejará de considerarlos útiles.

Salió de sus pensamientos cuando su pareja restrejo su rostro contra su mejilla derecha, sentándose a su lado. Estuvieron dándose mimos, ignorando la escalofriante mirada del gato gigante, hasta que todos los mini critters estuvieron reunidos.

El Catnap más grande se levantó y camino en dirección de las celdas, siendo seguido, sin decir ni una orden, por los pequeños peluches.

El pequeño Dogday mantuvo su distancia con el enorme gato, su novio se mantuvo pegado a su lado todo el camino hacia la prisión del hereje.

El perrito se fijo en las huellas de sangre que dejaban las patas del Catnap original, debío de haber matado a unos herejes.

Bueno, mal por ellos.

Si tenían suerte tal vez Catnap estaba de humor para compartirles un poco.

Sus pensamientos se detuvieron cuando llegaron a la celda del hereje.

Un Dogday el tamaño del Catnap original, sus piernas con pedazos de carne restantes y sus brazos estaban encadenados.

Los pequeños peluches se formaron en una fila y el Catnap más grande abrió la reja indicando que ya podían comer.

Uno por uno arrancaron pedazos grandes de sus bocas, el gato más grande se retiró a sus aposentos sin molestarse en escuchar las súplicas del perro, no quería oírlo gritar.

Cuando llego el turno del pequeño Dogday, observó a la versión más grande suya, era patético y miserable, mordió un gran pedazo de carne de su pierna derecha sin inmutarse por el grito de dolor que soltó el perro más grande.

Luego fue el turno del pequeño Catnap que hizo lo mismo, ambos se retiraron con sus trozos de carne en la boca a un gran cojín azul que ambos reclamaron como suyo.

Comieron juntos felices y cuando terminaron el pequeño Dogday junto su nariz con la del pequeño Catnap en forma de un beso.

Porque, bueno, no es como si pudiesen besarse, no con la sonrisa permanente que ambos poseen, pero la intención es la que cuenta.

Ambos se acostaron uno del lado del otro, durmiendo juntos, esperando que el día de mañana permanezcan los dos.

Porque mañana será otro día más en este infierno, pero si están juntos podrán superar lo que les depara el futuro.

#

Si se shipean las versiones de la serie, los experimentos y los niños ¿Por qué no shipear los mini critters también?

Así fue como nació este One-shot :D

Es algo difícil escribir sobre los mini smiling critters teniendo en cuenta que no hablan...

Así que hice lo mejor que pude

Una duda ¿Cuenta como relación tóxica si ambos son una mierds con todo el mundo menos entre ellos mismos?

Nos vemosssssss

𝐓𝐡𝐞 𝐒𝐮𝐧 𝐚𝐧𝐝 𝐓𝐡𝐞 𝐌𝐨𝐨𝐧 [ᶜᵃᵗⁿᵃᵖ ×ᵈᵒᵍᵈᵃʸ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora