Para mi siempre serás el único

Capitulo 8

- Tío, ¿No has notado que A-Zhan ha regresado un tanto diferente de su viaje?

Lan Qiren desvió la mirada del pergamino que estaba leyendo atentamente. Sus ojos dorados miraron a su sobrino mayor buscando algún gesto que indique que es lo que esperaba de respuesta. Ambos esperaban que Wangji reflexionara, pero sería temprano para dar su opinión.

- No he notado nada diferente. Sigue siendo como antes Xichen.

- Pero tío, ¿No has notado su mirada triste y las veces en las que se a perdido en sus pensamientos?

- Lo he hecho, pero ¿No estaba así antes de irse?

- No, definitivamente no es por el joven Wei, ya está aquí dos meses y ni siquiera a pedido salir para ir a buscarlo.

Qiren entendió el punto de vista de su sobrino. Tenía razón cuando decía que Lan Wangji había cambiado.

- Maestro Lan, este mensaje fue enviado por la secta Jiang.

El discípulo dejó la carta sobre la mesa y se fue tan rápido como llegó. Ambos, sobrino y tío se miraron y miraron la carta con un poco de recelo. ¿Qué problemas había causado Wangji? ¿Es que escapó en las noches y fue a hacerle bromas de mal gusto al líder Jiang?

- Xichen, léelo por favor.

- Si tío.

Xichen tomó el papel entre sus manos y no demoró en leer lo que la carta decía. En resumen, era las felicitaciones por la unión de ambas sectas por un pequeño heredero entre Jiang Cheng y Lan Wangji. Adicionalmente la lista de preparativos necesarios para la boda de estos mismos. Qiren rompió su tanza y apretó su sien con sus dedos, Xichen llamó a la calma, pero su tío reacciono de igual forma.

- ¡Lan Wangji!

Nie Mingjue estaba de regreso a su secta. Entró directamente a su habitación y se encerró en él. No deseaba ver a nadie a menos que fuera su hermano y no pasó mucho tiempo para que el apareciera.

- ¡Ge-Ge!

- A-Sang

- ¿Cómo fue tu viaje? ¿Wanyin está bien?

- Lo está... tenías razón, debí marcarlo.

- ¡¿Qué pasó?!

- Lan Wangji... y él...

- ¡¿Que hacían?!

- Se abrazaron...

- ... hermano...

- ¿Que? ¡Es suficiente para preocuparme!

- No, no lo es.

- Tu no sabes con que intenciones extrañas se le haya acercado ese Lan.

- Solo es un abrazo de amigos.

- ¿Cómo es que dices lo mismo que A-Cheng?

- Bueno, lo he visto babeándose por ti así que dudo que su corazón cambie de repente.

- ¿De verdad? ¿Cuándo? ¿Como me veía?

- Hermano, no te lo diré. Tienes que aprender a verlo por ti mismo para que no corras a mi y me preguntes cada vez que tengas celos.

- A veces eres tan maduro.

- ¿Cómo que a veces?

- Dejando eso de lado... ¿Que dijeron los ancianos?