Anhelo

24. El tiempo dirá!

Hobi venía de regreso, su visita fue muy corta, primero porque no quería dejar a Jimin mucho tiempo solo y segundo porque el padre de Jungkook no lo dejaba a solas con el chico por lo que no pudo darle ningún mensaje de Jimin, al final de la visita Hobi solo pudo despedirse dándole un abrazo al chico y decirle que siempre estaba ahí para él, Jungkook nunca se enteró de que Hobi estaba ahí por petición de Jimin, Jungkook partió rumbo a Japón, donde pasaría los dos últimos años escolares que le restaban.

Jimin salió del hospital y recibió tratamiento psicológico ya que los medicamentos no le ayudaban a superar sus traumas, ahora era un adulto que podía vivir una vida tranquila y normal, a veces recordaba los eventos traumáticos pero estos ya no controlaban su vida, se había ido a Seúl para estudiar en la Universidad de las Artes, ahí se reencontró con sus viejos amigos Nam y Suga, ambos pertenecían al departamento musical Nam como director de la escuela de música y composición, Suga era profesor de composición y armonía, era uno de los profesores más admirados ya que además de dar clases trabajaba para una importante empresa que se dedicaba a crear idols, Suga era el compositor en jefe.

Taehyung, Seokjin y Taemin se habían unido a la misma universidad que Jimin, todos seguían en contacto pero en diferentes departamentos, Jimin y Taemin estudiaban danza contemporánea, mientras que Seokjin se había unido al departamento de artes dramáticas, y Taehyung seguía los pasos de Suga por lo que estudiaba composición musical y canto.

En cuanto a Hobi, se había mudado a vivir con Jimin, los padres del rubio le habían conseguido una linda vivienda a las afueras del campus, la casa contaba con tres dormitorios, una terraza y una piscina, todo iba muy bien, al fin eran felices, o eso creían todos, que las cosas no podían estar mejor, en parte así era, pero no para Jimin quien siempre estaba preocupado por Kookie, ya habían pasado tres años desde la última vez que le vió, había contratado a varios detectives para que lo encontraran pero ninguno fue capaz de dar con su paradero, Jimin no perdía las esperanzas de volver a encontrar a su conejito, pero el destino parecía no estar de su lado, se había reunido varias veces con Yuna la prima de Jungkook, la chica le había dicho que no sabía dónde estaba su primo, que su tío un día se lo llevó y ya no volvió más, la chica temía que si Jimin se enteraba del paradero de su primo hiciera alguna locura para volver a estar con él y eso terminara mal para ambos, conocía ahora muy bien a su tío y sabía que era capaz de hacer cosas muy malas, se enteró que su padre no la había abandonado a ella y a su mamá, lo habían desaparecido y el responsable no era otro más que su tío, por eso se guardó el secreto muy a su pesar al ver tan devastado a Jimin, pero eso era lo mejor para todos.

Jimin y Suga se habían vuelto a encontrar tan solo hacia menos de dos años y a pesar de que Jimin nunca se había olvidado de Kookie había decidido darle una oportunidad a Suga, después de todo él no sabía si algún día se volvería a encontrar con Jungkook, y se merecía tratar de ser feliz como le decía Hobi siempre, después de todo Suga solo tenía atenciones con él, le trataba demasiado bien, llevaban un año completo de cortejo, de ahí no habían pasado, pero Hobi le había hecho ver a Jimin lo bueno que era Suga y no debería hacerlo esperar más, por eso Jimin estaba decidido le daría esa oportunidad que tanto había buscado.

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Hacia un año que había salido de ese horrible lugar, donde había sido golpeado y humillado en cada oportunidad, creían que lo habían "reformado" como decían ellos pero Jungkook simplemente aprendió a esconder sus sentimientos, ya no lloraba por todo y suplicaba  que le dejaran volver con Jimin, ahora era "un hombre de verdad", según ellos había perdido el gusto por los hombres o más específicamente el gusto por Jimin, era un internado muy conservador y no admitían ningún tipo de creencia o gusto que no fueran los indicados por ellos, Jungkook rápidamente se había dado cuenta que no ganaba nada con tratar de luchar, lo mejor era rendirse y hacer lo que ellos le decían, así fue como pasó esos dos años, al salir se tomó un año sabático junto con su mejor amigo del internado, Cha EunWoo conocía todo sobre Jungkook, incluso sobre sus sentimientos hacia Jimin, que no habían cambiado, simplemente estaba resentido con Jimin por no haberlo ido a buscar, EunWoo siempre le consolaba y le decía que seguro Jimin no sabía dónde estaba y que por eso era difícil que llegara por él, una vez le dijo que era muy costoso viajar hasta ahí y que seguro Jimin no había podido ir a buscarlo, primera y última vez que le dijo eso, Jungkook se había enojado con él y más con Jimin por no pagarle a alguien que fuera a buscarle, le había dicho que mejor no le ayudara si no sabía nada, que Jimin estaba podrido en plata y que si realmente hubiese querido ir por él ya lo hubiera hecho, grave error por parte de EunWoo que solo le quería consolar y terminó regañado.

Jungkook se había dedicado el último año a ejercitarse y construir una nueva imagen, se quería ver grande, musculoso y rudo, se tatuó todo el brazo derecho y se puso piercings en las orejas, ceja y labio, nunca más lo tildarían de ser un niño débil e indefenso, y Jimin se arrepentiría de haberlo abandonado, ese era su plan regresar a Corea del Sur y buscar a Jimin para que se diera cuenta de lo que se perdió por abandonarlo, EunWoo también era coreano por lo que regresaría con Jungkook, deseaba estar de vuelta en su país y reencontrarse con su familia, y por otro lado deseaba conocer en persona a Yuna, esa agradable muchacha que le enviaba cartas y fotos a Jungkook, ella de tanto en tanto le tomaba fotos a escondidas a Jimin para enviárselas a Jungkook, el primer año fue muy doloroso verlo, en las fotos estaba el rubio en compañía de sus amigos de la universidad todos alegres y festejando, todos menos Jimin, siempre se veía triste, el segundo año su Mimi se veía mejor, ya no se notaba triste pero tampoco le veía el brillo en su ojos como cuando estaban juntos, a finales del segundo año algo pasó, y ahora se veía a Jimin contento y ya no salía solo en las fotos, ahí estaba su Jimin en compañía de Min, el ex capitán de baloncesto de su antigua escuela y también el ex-novio de Jimin, acaso Mimi ya lo había olvidado y había regresado con su ex, después de eso no volvió a recibir fotos de Jimin, Yuna le decía en sus cartas que ella se había mudado y ya no lo podía ver, pero él sospechaba que la verdadera razón era para que no se enterara de la relación de Mimi y Yoongi, desde ahí Jungkook empezó a cambiar su aspecto y su personalidad, y ahora era el momento de ir a Seúl.