𝙖𝙩𝙚𝙣𝙚𝙖 𝙞𝙣𝙯𝙪𝙣𝙯𝙖
sintió como una ola de emociones golpearon fuertemente contra su dulce corazón, haciéndola soltar un suspiro al tenerlo frente a ella. con nerviosismo, sus manos se aferraron al pequeño obsequio que ovidio le había entregado minutos atrás y se dejó embriagar por el aroma tan masculino que emanaba el chapito, al tenerlo cada vez más cerca le fue difícil mantener la vista sobre él. sentía que en cualquier momento podría dejarse caer para ser totalmente atendida por el hombre frente a ella, ya no era un secreto que atenea estaba disfrutando la cercanía que tenían en esos momentos. el ligero toque de la mano de ovidio sobre su mejilla, obligándola a verlo directo a los ojos. buscando algún indicio de desinterés de parte de la mujer; cosa que no percibió.
los segundos parecían una eternidad y su alrededor dejó de importarles, fue entonces que pasó. sus labios se tocaron por primera vez, en un beso que demostraba la inocencia que aún mantenían ambos amantes.
sus labios se acariciaban de una manera tan sutil, pero a la vez mostraban la necesidad de sentir el contacto físico del otro. mientras que ovidio guzmán mantenía una de sus manos sobre la suave mejilla de la chica, su otra mano sujetaba con firmeza su cintura. de forma posesiva, buscando impregnar su presencia en ella, para así alejar a cualquier persona que quisiera aprovecharse de su ángel.
oh, su bello ángel.
mientras él intensificaba cada vez más el beso, se sentía abrazado por los delgados brazos de la mujer alrededor de su cuello, casi colgándose de el. y de alguna forma, sentía como las alas « metafóricas » de su mujer lo protegían de la realidad que los esperaba fuera de la pequeña oficina.
⎯ ovidio.. ⎯ soltó en un susurro.
aún se encontraban abrazados, buscando así apaciguar un poco los rápidos latidos de sus agitados corazones. sentían nervios y un poco de temor por lo que pudiera ocurrir después. ¿qué habían hecho?
atenea suspiró, cerrando sus ojos con fuerza. no era correcto, no era moralmente correcto lo que ella había aceptado hacer. aunque simplemente había sido un inocente beso, ovidio guzmán era su paciente y ella era su psicóloga. entre ellos no podía ocurrir nada más, además que él estaba casado.
había besado a un hombre casado.
se separó bruscamente, desorientando por completo al chapito.
⎯ eh, ¿qué ocurre?
ella no respondió. solo corrió hacia la puerta de su oficina e intentó abrirla, fallando en el primer intento, pues tenía el seguro puesto.
⎯ chula..
volvió a ser ignorado por la mujer, quien esta vez sí logró abrir la puerta y salió corriendo, huyendo de él. escuchó el golpeteo apresurado de sus zapatillas contra el suelo y suspiró al entender que posiblemente lo había arruinado. ovidio dejó la rosa de metal sobre el escritorio y aunque no quisiera hacerlo, abandonó la oficina.
sus lágrimas descendían con rapidez por sus coloradas mejillas, una detrás de la otra, parecía una tormenta que cada vez tomaba más fuerza. trató de apartarlas bruscamente pero era inútil, pues otras salían a reemplazar aquellas que sí lograba alejar de su rostro. se sentía frustrada y sobre todo, se sentía una estúpida. ovidio guzmán era un hombre casado y él solo se estaba fijando en ella porque era la única mujer en ese lugar que parecía no odiarlo, no porque la quisiera.
¿cómo había sido tan tonta?
soltó un sollozo, el cual trató de retener cubriendo su boca con ambas manos. no quería ser escuchada por algún oficial. aún se encontraba en las instalaciones del penal, más específicamente en el baño del personal. llorando como una adolescente, por un hombre que tenía poco tiempo de conocer y del que, tontamente, estaba sintiendo cosas.
su corazón era un mar de emociones, las olas golpeteaban fuertemente contra su cuerpo y ella no sabía nadar.
solo esperaba no ahogarse en su sufrimiento.
⎯ ¿está todo en orden? ⎯ se sobresaltó al escuchar esa voz, seguido de un suave golpeteo en la puerta del baño.
⎯ sí, sí. ⎯ respondió con inseguridad y se levantó de la taza del baño en la cual estaba sentada. tratando de apartar nuevamente las lágrimas.
⎯ no se escucha muy bien.
abrió la puerta, topandose con doña maria; la encargada de limpieza. le regaló una pequeña sonrisa, tratando de fingir que no le afectaba ni un poco lo ocurrido con ovidio.
⎯ es que extraño a mi familia. ⎯ mintió. ⎯ , dejé todo en sinaloa y es tan difícil empezar desde cero.
⎯ ay, mi niña. ⎯ le regaló una sonrisa sincera, con paso lento dejó el trapeador que tenía entre sus manos recargado en la pared. para acercarse nuevamente a ella y abrazarla. ⎯ es parte de crecer, pero todo mejorará.
⎯ sí...
. . 𝖓𝖔𝖙𝖆 𝖆𝖚𝖙𝖔𝖗𝖆 𓂃 ♥︎
no me pude contener, tenía que subirles ya este capítulo. es cortito pero muy necesario, el siguiente tiene mucho drama y (creo yo) que les va a encantar.
por si hay dudas, sigo escribiéndolo.
pero en cuanto termine, ¡lo subiré!
no los haré esperar tanto esta vez jsjs.no olviden votar y comentar, quiero saber si están disfrutando el camino que está tomando esta historia.
así como también me gustaría saber en qué otra historia les gustaría tener actualización. <3
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𝘮𝘪 𝘣𝘦𝘭𝘭𝘰 𝘢𝘯𝘨𝘦𝘭 𖹭 𝙤𝙜𝙡.
Fanfictionㅤ ━━━━ 𝙢𝙞 𝙗𝙚𝙡𝙡𝙤 𝙖𝙣𝙜𝙚𝙡 ━━━━ ᥱn dondᥱ trᥲ́s sᥱr cᥲpturᥲdo por sᥱgundᥲ vᥱz, ovidio guzmᥲ́n pᥲsᥲ sus díᥲs rᥱcluido ᥱn ᥱl pᥱnᥲl dᥱl ᥲltiplᥲno; ᥱl mᥲ́s sᥱguro dᥱ todo mᥱ́xico, ᥱn ᥱsperᥲ dᥱ su juicio finᥲl. ִֶָ ִֶָ ִֶָ ִֶָ ִֶ...