Nuestra Historia (terminada)

I

Quiéreme por favor

Tal vez debía darme cuenta desde niños pero no quise abrir los ojos, eran mis papás después de todo ellos no me querían, Solo fue un cordón roto y un embarazo no deseado.

Ellos ya tenían a su heredero estrella, yo solo era un tonto que quería al menos que lo miraran.

¿Que hice mal para que mis papás no me quieran?

¿Hice algo mal?

Si fue así lo sentía tanto, Mire mis pequeñas manos regordetas de un niño de solo cinco años, estaban Llenas de sangre.

Me levanté con cuidado del frío suelo para caminar fuera del calabozo de la casa, Camine con calma y cuidado de no lastimarme demasiado, Paso a paso era un dolor infernal que no le deseaba a nadie.

Hice puchero mientras abría con el menos ruido posible la puerta de mi habitación.

La cerré detrás de mi mirando la Vieja habitación de juegos de mi hermano, Era más pequeña que el resto de la casa pero al menos tenía una habitación.

Después de todo los juguetes de JR ya no caben acá.

Me acerque con cuidado al pequeño manual Muggle de primeros Auxilios que me regaló el señor Rosier en mi cumpleaños.

Sorbi mi nariz Y limpie las lágrimas que se acumulaba en mis ojos, Me deje caer con cuidado en el suelo para comenzar a leer, Agarrar las cosas necesarias que el señor Crouch me regaló en mi cumpleaños.

Debía curarme, después de todo nadie más lo haría, Papá está ocupado en la oficina con la señora que entró hace horas, Mamá está con JR en el partido mundial de Quiddich.

Y yo estaba acá, después de interrumpir a mi papá en su Oficina, Recibí mi merecido, No debí hacerlo.

Sonreí levemente para seguir leyendo.

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¿Por qué papá golpeaba a mamá? ¿Que había hecho mal Mamá?

Me acomode en mi lugar en la mesa, escuchando de fondo los Golpes, Los llantos y las cosas caer.

Sorbi mi nariz para terminar de comer, me levanté de un salto para ir a la cocina, comenzar a limpiar los trastes sucios del almuerzo, Sali de la cocina con cuidado, abrí la puerta del jardín para salir, Camine con cuidado por el jardín hasta pasar la Barandilla que dividía mi casa con la de mi mejor amiga.

Camine por el patio de la hermosa casa hasta parar frente a la puerta de vidrio, La toque unos momentos antes de que una sonriente y hermosa mujer me abriera la puerta.

-Sev, pensé que no vendrías.

-Lo siento señor Evans.

La señora Pelinegra y de ojos verdes se hizo a un lado dejándome entrar a la casa, Así que entre me quite los zapatos en la entrada para dejarme en calcetines, no quería ensuciar el suelo de la casa.

-Vamos, las niñas está por llegar a la casa.

Asentí y seguí a la señora a la cocina donde tenía música a todo Volumen, Se movía de un lado a otro.

La casa estaba llena de color.

No como mi casa, que era un infierno.

-¿Ya comiste Sev?

Quería asentir, decir que si, pero Solo había comido Huevos revueltos, Era lo único que sabía hacer.

La mire con los ojos bien abiertos y mis mejillas se pusieron calientes cuando ella me miró con una sonrisa comprensiva.

-Esta bien, Haré para ti también.

Asentí comenzando a Jugar con mis manos nervioso, Intentando calmar mi nervioso corazón. Cuando solo la puerta principal indicando que las Ruidosas hermanas entraron a la casa.

Sus pasos y típica pelea se hizo presente.

Mire hacía atrás para ver a las dos hermanas.

-Hola.

Lily me miró para regalarme una sonrisa, correr a dónde yo estaba y rodearme en un abrazo. Mientras Petunia solo me miró sobre el hombro y se acercó a su Mamá ignorandome.

-¿Cuando llegaste? ¿por qué no viniste hace días?

- llegué hace rato, Es que Tobias.

Lily nego levemente mientras se alejaba de mí.

-¿Vamos a mi habitación a jugar?

Asentí y me levanté ¿Por qué yo no podía tener una familia así?