~𝐸𝑙 𝑐ℎ𝑖𝑐𝑜 𝑑𝑒 𝑚𝑖𝑠 𝑠𝑢𝑒𝑛̃𝑜𝑠~ 【Camus x Milo】(HIATUS)

~Charla...~

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~Unos minutos después~

La rubia entró con una bandeja en manos, la bandeja contenía tres tazas con té, una para cada uno de ellos. El caso, Camus había dejado de susurrarle cosas a Milo, el cual sólo pudo soltar pequeñas risitas, le daba gracia la "convivencia" entre Natassia y Camus; la verdad si parecían hermanos, pero no de esos que se tratan con cariño

La rubia quedó desconcertada al ver como nada más ella entró, Camus se alejó de Milo al instante, parecía que le estuviera diciendo algo, pero no sabía qué era exactamente. Así que les preguntó

Natassia: ¿De qué hablaban? ─ les cuestionó con una ceja alzada

Camus: No es nada, sólo le contaba una anécdota... ─ respondió sin más

Natassia: ¿Seguro? ─ preguntó mientras los dos asentían ─ ¿Ok...? Bueno, les traje un poco de té ─ avisó mientras ponía la bandeja en una mesita

Milo: ─ Sólo se tapa la boca aguantando la risa ─

Natassia: ¿Estás bien? ─ preguntó alertada, parecía que en cualquier momento le iba a dar un ataque ─ Ya en serio, ¿qué era de lo que realmente hablaban? ¿Qué tanto le susurrabas? No creas que no me di cuenta, Camus ─ lo regañó

Camus: Yo no le dije nada, únicamente le contaba algo que me pasó...

Natassia: ¿Ah sí?, ¿qué era? ─ le preguntó seria, mientras el otro se quedó en silencio, intentando pensar en una excusa ─ Mentiroso... ─ susurró molesta ─ Mejor tomemos el té antes de que se enfríe

Camus: Como digas... ─ dijo aburrido, al mismo tiempo que tomó la taza para beber

Después de terminar esa pequeña charla, el ambiente se sintió extrañamente tenso, ¿tal vez era por lo que dijo Camus? ¿O tal vez sólo se sintió tenso porque sí? Aunque pudieron haber más razones. Pero volviendo al tema, se sintió extremadamente tenso, fue un silencio muy incómodo entre los tres. Pero, la rubia habló, rompiendo el hielo

Natassia: Ah... ¿Tienen algún tema para conversar? ─ preguntó con una sonrisa incómoda

Camus: Sin comentarios... ─ respondió, mientras sintió como alguien se apegó a él, al voltear, pudo ver a Milo aferrado a él ─ ¿Qué sucede?

Milo: ¿Recuerdas... Lo que habíamos acordado? ─ le susurró al oído

Camus: ¿Lo de tu actitud desanimada en el café?

Milo: Ujum... ─ asintió mirándolo con preocupación

Camus: ¿Quieres que lo hablemos en un lugar más privado los dos sólos? ─ cuestionó mientras el peliazul solamente asintió una vez más ─ Entiendo... Oye Nati

Natassia: Dime ─ Contestó mientras tomaba un sorbo de té

Camus: Milo y yo... Tendremos una pequeña charla, nos iremos un momento, ¿crees que puedas esperarnos unos minutos?

Natassia: Sí, claro. Hablen de lo que tengan que hablar, no veo ningún inconveniente al respecto

Camus: Bien ─ dijo tomando la mano de Milo y parándose para después dirigirse al baño