CAPITULO 19

2.1K 80 63
                                    


Hyunjin aún impresionado debido a lo que veía, miro a Felix, quería besar a su increíble novio, por todo, no exactamente por el regalo o la sorpresa sino por amarlo y estar con él, solo el hecho de que el exista ya era más que suficiente.

El rubio rodeo la cintura del menor atrayéndolo para plantarle un beso.

—Me encantas Lee

—Y tú a mí, pero aún no viste el verdadero regalo— menciono tomándolo de la mano para guiarlo a la cama, empujándolo así haciendo que se siente— ábrelo

Yongbok le entrega la caja, el mayor la toma desatando el lazo, el contrario observa cada detalle, como su novio levantaba la tapa, la expresión en su rostro. Las pinturas y pinceles, oficialmente tenía el mejor novio del mundo. Las estuvo buscando por mucho tiempo y no las encontraba. Y su lindo Lixie las había conseguido para él.

-Cuantas veces debo decir que te amo para devolverte esto- quería demostrarle cuanto lo amaba y lo haría, haría que su Bokkie sane y sea muy feliz. Pensó que había terminado y comerían los brownies junto a las frutas con miel, el vino o el jugo con hielo. Sin embargo, no fue así había más.

— No necesitas devolverlo- dice dándole un beso en la mejilla — te falta algo— señala dentro de la caja

Se apresura a mover las tiras de papel que cubrían el último regalo. La sonrisa que tenía al buscar su último regalo se volvió en una expresión de confusión al ver.

Un dildo.

Levanto la mirada viendo a Felix, tal vez ese no era el regalo y se había metido por accidente, la pregunta era ¿para que el quisiese un dildo?

—¿Lix? — pregunto confuso. El menor se paró trayendo algo escondido en su espalda, se puso detrás de él sacando lo que escondía. Hyunjin ya no vio nada.

Oscuridad.

Felix cubrió sus ojos, ahora estaba más confuso, claro que no era tonto. Lo pensó, pero no quiso creer que era así, ignoro esa idea en su cabeza.

—Espera aquí, no te quites la venda— salió de la habitación yendo al armario para cambiarse. Se puso el conjunto de lencería y se miró en el espejo, estaba nervioso, en qué momento decidió hacerle caso a su amigo, ya no lo sabía.

Se veía muy bien, si, en esa situación se veía muy gracioso, pero debía meterse en el papel. Todo esto era para Hyunjin.

Salió del vestidor del armario, con una bata cubriéndolo, ver a Hyunjin con los ojos cerrados con camisa abotonada hasta la mitad, las mangas dobladas, pantalón de vestir junto a una correa y los zapatos. Se veía tan sexy acostado en la cama, esperando.

Esperándolo.

—Párate- dijo en cuanto estuvo enfrente suyo.

—¿Puedo abrir mis ojos? — pregunto mientras se levantaba y quedaba de pie

—No aun no — contesto, lo guio hasta el pequeño sofá izquierda de enfrente de la cama. Hizo que se siente, quedándose el parado justo delante suyo— abre los ojos

Hyunjin obedeció la orden abriéndonos de inmediato, Felix en bata, cada vez se convencía más que era lo que pensaba.

Los dos se miraron, Felix borro toda vergüenza en el para empezar lo que tenía en mente.

—Hyunjin vas mirar todo lo que haga, debes controlarte y hacer cada cosa que te diga ¿lo harás? — lo miro esperando su respuesta. El mayor asintió aceptando los términos que le ponía su novio.

Our MemoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora