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La fiesta de bodas había empezado justo después de que el grupo del padre se había ido, los meseros se encargaron de quitar las sillas para que la gente tenga más espacio en la pista de baile.

Se le tomaron muchísimas fotos a la pareja, tanto de parte de los reporteros y paparazzi como de sus amigos y pocos familiares que estaban en el lugar.

Pero antes de que toda la fiesta empezara a afianzarse, fue hora de que el único niño del lugar se fuera, ya que en la boda iba a haber alcohol y ese no era un ambiente saludable para un niño tan pequeño.

— ¡Papáaaaa, por favor, no me quiero ir! — todos los presentes miraban con ternura la escena.

— ¡Hwang Jeongin!, no seas tan dramático. — Hyunjin regañaba con dulzura al niño.

— P-pero, no me quiero ir, Innie quiere estar en la fiesta, me puse esta ropa fea para aquí y quiero bailar. — Hyunjin tuvo que alejarse un poco de todos para que no escucharan lo que fuera a decir su hijo, sabía que ese niño no tenía filtros y no quería sufrir alguna humillación pública.

— Pero si te quedas no te gustará, es una fiesta para adultos. No hay ningún niño con el cual te puedas divertir aquí.

— ¡Pero quiero pastel! ¡¿Por qué le van a dar pastel a todos menos a mí?! Me dijiste que me querías. 

Hyunjin carcajeó. — Claro que te quiero. Pero si es por el pastel, yo me encargaré de guardarte un pedazo para cuando volvamos a casa.

— ¡Si quiero! ¿Pero cuándo volverán a casa?

— Mhn... No lo sé exactamente, tu papá no me quiso decir detalles, pero probablemente en menos de una semana estemos de vuelta. — Hyunjin no tenía planeada tener una luna de miel, pero ese mismo día Félix le dijo que había comprado unos boletos de avión y que ese era su regalo dejando bastante sorprendido al alfa.

— ¡¿Una semana?! Esos son uno, dos, tres... — contaba con sus dedos hasta que mostró su palma completa y dos dedos de la otra. — ¡Siete días! ¿Van a dejar a Innie solito 7 días? ¡Yo no quiero papá! ¡No, no, no!

— En realidad no te vas a quedar solo, vas a pasar esos días en casa de Minho y Jisung, ellos te caen bien, ¿no?

— ¡Sí, pero tú y papi me caen mejor! — parecía que iba a llorar una vez más y quería evitar eso a toda costa.

— No, no, no, ¿sabes? Van a ser menos de 7 días, ellos te quieren mucho y jugarán a lo que quieras contigo, además vas a poder ver a las mascotas de Minho, tiene un par de perros, un lorito, y tres gatos.

— ¡¿Mascotas?! ¡Bien, si quiero! Ya te puedes ir, pero no te olvides de mi pastel. — Hyunjin suspiró

— Traicionero. — murmuró para que solo él pudiera escuchar. Con esto el pequeño Jeongin se pudo ir a casa tranquilo y sin problemas, obviamente no se olvidó de hacerle el mismo teatrito a Félix quien casi renuncia a todo, pero Hyunjin le advirtió que no lo hiciera porque todo era una vil y despiadada técnica para obtener más pastel de la boda.

Lo que quedaba de celebración fue bastante bien, había mucha gente tomando y bailando mientras conversaban y hacían nuevas amistades, Félix había conseguido mucha más gente con la que intercambio números, aunque no tenía ni idea quienes eran y porqué estaban invitados.

El momento del balls fue completamente hermoso, todos se apartaron del centro para que los novios tuvieran toda la atención y pudieran bailar al compás de la suave canción, fueron varios minutos dónde Félix estaba abrazado a su ahora esposo siguiendo los movimientos simples que hacía con los pies.

Singularity [Hyunlix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora