30 𝘥𝘪́𝘢𝘴 𝘥𝘦 𝘖𝘛𝘗 𝘙𝘦𝘪𝘤𝘩 𝘺 𝘜𝘳𝘳𝘴

Beso

6:00ᴀᴍ

ᴇsᴛᴀᴅᴏs ᴜɴɪᴅᴏs/ ᴡᴀsʜɪɴɢᴛᴏɴ ᴅᴄ
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Era bastante temprano, habían sido citados por la Organización, así que decidieron que lo mejor era llegar con anticipación.

No estaban solos en aquella Sala, había unos cuantos contrys de distintas partes, Europeos, africanos latinos y asiáticos, pero fácilmente podía deducir que entre todos ocupaban unos 40 asientos.

Muy poco para todos los países que habían en el mundo, pero bueno la reunión comenzaba a las 8:00 am así que algunos a lo mejor ni siquiera habrán llegado al territorio capitalista.

Estaba sentado junto a su Alemán, después tendría que cambiarse de puesto en ir con su familia, por eso aprovecharía todo el momento para estar a su lado antes que dieran inicio a la reunión.

Suspiro y acostó su cabeza sobre sus brazos, tenía bastante sueño por estar madrugandose por días al tener bastante trabajo. El Alemán al ver la posición de su pareja no dudó en acercarse y verle con curiosidad.

— Puedes dormir si quieres... Aún falta mucho para empezar —. Ofreció mientras jugaba con los cabellos que sobresalían del gorro del soviético. Este mismo levanto un poco su rostro solo para voltear y verle de manera cansada.

— Me gustaría... Pero digamos que estas mesas no son muy cómodas... Y donde me gustaría dormir no puedo, porque estamos en un lugar público —. Soltó un bostezo después de terminar de hablar, viendo como más atrás el alemán también lo hacía.

— Mierda... Me es contagioso... —. Miro a todas partes para luego mirar de nuevo al ruso —.. . No hay muchos contrys, y creo que ellos están pendientes de lo suyo en este momento... Además no te verán si te acuestas en mis piernas, ven aquí, lindo oso —. palmeo sus muslos dando una clara invitación, haciendo que al ruso le diera más sueño.

Primero echo un vistazo a la Sala, al parecer aquellos contrys en serio estaban en lo suyo, con cuidado se acercó más al dictador besando su mejilla y luego sus labios por un rato antes de recostar su cabeza en sus piernas tal y como se lo había pedido el más alto.

Poco a poco sus párpados se fueron cerrando, las caricias a su cabeza también ayudaron a que cayera profundamente dormido aún así aquellas acaricias no se detuvieron.

...

8:16ᴀᴍ

— amor.. . Amor despierta —. Habló lo más suave posible para no despertarlo de un susto suspirando al ver como su pareja poco a poco empezaba a moverse.

— mmm... ¿Qué pasa? ¿Qué hora es.. .? —. Se levantó de su pareja para poder estirarse bien y estregar sus ojos en el proceso.

— ¿Estuvo buena la siesta? ¿Cuanto llevas dormido? — pregunto Weimar al otro lado del ruso.

Pego un brinco al ver a Weimar aún lado suyo, no sólo eso la puta Sala ya estaba llena de contrys.

¿Pues cuanto se durmió?.

—¡Reich! De dije que me despertaras—. Miro mal a su pareja quien solo se encogió de hombros en su lugar.

— No lo hice porqué ONU aún no ha llegado...—. Trato de calmar al mayor además, era cierto lo que decía hace media hora que ese pirano no daba señales de vida algo muy raro en el, pues no suele llegar tarde.

Quedó en blanco, miro al lugar donde la Organización siempre estaba, y si era cierto, aquel  lugar se encontraba vacío — Pues... No se si sea bueno o malo... Pero lo mejor será que me vaya a sentar a mi puesto antes de que llegue, nos vemos después —. Se levantó dispuesto a irse a su lugar sin embargo, la mano del aleman lo detuvo.