Argylle: agente secreto [Ep. 5]

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Me preparaba para ver una película. Me coloqué los audífonos y empecé a revisar la lista de títulos disponibles. Los estrenos más recientes estaban en la lista, y entre estos, estaba Argylle, película en la que Dua Lipa tiene un papel secundario. Ni se te ocurra, dijo cuando vio desde su asiento que seleccioné el título para leer la información adicional. ¿Porqué? Empecé a reir. Obviamente no soy actriz, lo hice como favor a una amiga. En este punto pensé que podría confirmar todos los rumores de que Taylor Swift era en realildad autora de la novela que inspiró la película. Pero en ese momento no me quise ver como swiftie así que decidí dejar pasar la oportunidad.

El trailer empezó a reproducirse automáticamente sin que yo tocara ningún botón. Te ves bien de rubia, le dije. Te estás burlando, comentó. De verdad que no. Se te ve bien. Luego ella me dijo que el rubio era muy dificil de mantener, algo que todas las chicas saben y que eso le decía que yo nunca había tenido una novia con el cabello teñido de rubio. Por eso volví al negro. Añadió que fue un capricho del director, verla de rubia, y a ella le pareció divertido también verse así, pero ahora se arrepentía. Empecé a sospechar que lo que le molestaba de la película era su tono de cabello, más que su habilidades histriónicas.

Tu no me puedes decir qué puedo ver y qué no, le dije, me coloqué los audífonos y empecé a reproducir la película. De reojo pude ver su cara de asombro y sus ojos de venganza. Ok. dijo, y fingió que miraba, como lo había hecho durante todo el vuelo, la pantalla de su celular. Luego me quitó los audífonos, los desconectó de la pantalla y los guardó en el bolso del pasajero que viajaba en el asiendo delante del nuestro. Me levanté para recuperarlos, entre risas, el bolso pertenecía a una señora ya mayor, que dormía a pierna suelta y con la boca abierta. Me acerqué para tomarlos y Dua empezó a toser, de una forma tan exagerada, que despertó a la señora en el momento que yo hurgaba en su bolso. Se le estaba cayendo, le dije, pero me devolvió una mirada inquisidora y colocó el bolso debajo de su asiento.

Regresé a sentarme. Ella estaba feliz, soltaba unas risillas.

—Ahora qué voy a hacer durante todo el vuelo? —Le dije.

—Pues tendrás que hablar conmigo, —me dijo mirándome a los ojos—, o te parezco demasiado aburrida? —se acomodó el cabello, y sonrió.

Dua Lipa se enamoró de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora