way back home ଓ chaelisa

capitulo 22.

Advertencias: chaelisa como pareja principal, cositas lindas y fluff.

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Pronto llegó el momento de marcharse y volver a Seúl, pues el nuevo año académico iba a iniciar pronto. Tanto ChaeYoung como Lisa tenían varias cosas qué hacer, en especial la mayor, que debía entregar las planificaciones correspondientes a sus distintos cursos. En casa de los padres de la alfa no tenía mucho tiempo libre para dedicarse a ello, así que convinieron que era mejor volver, al menos, dos semanas antes de que iniciara el nuevo semestre.

—¡Espero que nos visiten pronto! —dijo Sandara, con los ojos llorosos mientras observaba a ChaeYoung poner en su asiento a RyuJin.

—¡Claro! —Lisa la abrazó—. Además, pueden ir a visitarnos también, ¡Estaremos más que felices de recibirlos!

—¡Aos, buba! —chilló RyuJin, moviendo su manito desde su lugar—. ¡Aos, bubo! ¡Muak, muak! —y comenzó a lanzar besitos.

Eso provocó que Sandara se pusiera a llorar y JiYong tuvo que abrazarla para consolarla, a pesar de que también estaba llorando. Fue una despedida un poco desastrosa, pero al menos, Lisa logró ganarse a sus suegros gracias a RyuJin. Su bebé era fabulosa.

—Estoy preocupada. —le dijo Lisa cuando iban saliendo de Daegu, entrando en la carretera.

—¿Y eso por qué? —preguntó ChaeYoung, enarcando una ceja.

—Tu madre se volverá loca si es que tenemos más hijos. —explicó la omega, y ChaeYoung solamente soltó un par de risas, a pesar de que sabía que Lisa tenía razón.

Sin embargo, las palabras de Lisa hizo que las dos pensaran en un futuro próximo para ellas. Si bien la menor no quería tener un hijo más hasta terminar con sus estudios, le entusiasmaba demasiado la idea de poder quedar embarazada de ChaeYoung y dar a luz a su hijo. Sabía que para la alfa era una idea que también le emocionaba, porque sería dar unos pasos más serios en su relación, donde ambas se afianzarían con una vida juntas.

—Te amo. —le dijo Lisa, de pronto, y ChaeYoung le agarró la mano.

—Yo también te amo, bebé —le aseguró, sonriéndole—. Y sabes, estuve pensando en algo...

—Uh, a veces tus ideas son algo extrañas. —bromeó Lisa.

ChaeYoung le dio un apretón.

—¿Qué tal si piensas en vivir juntas? —le dijo, suavizando su voz—. En mi departamento, las dos juntas y RyuJin.

—¡Baaaaaaa! —gritó RyuJin, desde atrás, chupando la cabeza de su revivido mono. Le compraron uno igual al que tenía, que, a esas alturas, se encontraba todo raído y gastado. Ya no aguantaría más destrozos por parte de la bebé.

—¿Hablas en serio? —preguntó Lisa, tratando de contener su sonrisa de felicidad—. ¿No es un poco apresurado?

—Claro que no —ChaeYoung sacudió su cabeza—, además, ya tienes mi marca. Quiero compartir toda mi vida contigo, mi amor.

Lisa no podía con la emoción, casi queriendo abrazarla, pero logró contenerse sólo porque ChaeYoung estaba conduciendo. ¿Vivir juntas? ¡Era una maravilla! De sólo pensarlo, sentía que iba a llorar como hizo su suegra, entendiéndola cuando sus sentimientos la sobrepasaban. Era una gran noticia capaz de dar vuelta su mundo entero.

—Hay que planificarnos bien —continuó ChaeYoung, sin dejar de sonreírle—, y decorar bien bonito el nuevo cuarto de RyuJin, ¿Está bien?

—¡Claro! —la omega se estiró y le dio un beso en la mejilla—. ¿Cuándo te gustaría que me mudara?