𝟗.-𝐇𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐨

114 11 1
                                    

Advertencia;; Recordar que es una historia tratando de tocar mas la realidad que lo ficticio. Suerte. Abra una escena +18 leve, así que atentos.

Escuchar las peleas diarias, fue una de las torturas mas grandes que había logrado tener en mi vida

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Escuchar las peleas diarias, fue una de las torturas mas grandes que había logrado tener en mi vida. Yo siempre tuve un gran aprecio por mi hermano, no había dudas de eso. Amaba verle jugar hasta con las canicas mas pequeñas, poder escuchar sus risas, cuidarlo de los malos tratos o de las cosas nefastas. Wooyoung era mi pequeña luz, aquel que deseaba proteger de todo y todos. Pero todos tenemos un limite y el mío se rompio el día que aquellos llamados padres, querían controlar mi vida como si nada. No era algo malo para muchos, pero para mi, que ya tenia todo planeado, estaba siendo uno de los peores azotes del mundo. 

Pero aun recuerdo el llanto de mi hermano, la forma en que se aferraba a mi camisa con fuerza, con aquellas manitas de bebé, su rostro lleno de lagrimas gruesas conforme los minutos pasaban. Pero no sabía que decirle, realmente, ese día estaba abandonando a su suerte al ser que me mantenia de pie. Sabía de antemano que tampoco podría hacer algo, no podía llevarmelo, ambos eramos menores y por lo menos yo tenia mucha más edad para saber que mis padres no me buscarian, ya que ellos, estaban haciendo lo mismo con wooyoung. Queria tomarlo, abrazarlo contra mi cuerpo y decirle que su hermano volveria a por el. Pero no pude, solo pude despedirme con un lo siento y arrancando sus manitas.

Fue doloroso caminar mientras escuchaba sus desgarradores gritos. El siempre había sido alguien mimado conmigo, lo se, se que yo era su proteccion, se que el podría haber sufrido en manos de esos tipos. Pero la realidad, era que yo ya no podia más. 

Durante la travesia, conoci a mi actual pareja, mi pequeño omega, jongho. Era menor que yo por unos 3 años y era el ser que había devuelto mi alma a la tierra. Fue quien escucho y me apoyo con todo lo que tenia en mente. Tenia 20 años cuando lo conoci y realmente el tenia 18 años apenas, pero ya teniamos en nuestras manos, todos los planos de nuestra vida. Entre todos, le apoye en ingresar a la misma universidad en la que yo cursaba, de esa forma, me aseguraba de tenerlo más protegido y quizas, para no tener esa preocupacion. No fue dificil que se adaptara, se que conocia mucha gente y la verdad, estaba bastante agradecido con eso. 

Lo que más ame, fue que el propuso aquello que más me dolia y anhelaba día y noche. Sacar a mi hermano de aquel infierno del que seguro seguía viviendo. Realmente lo intente, fui a mi antigua casa a buscarlo cuando tuve la mayoria de edad, pero ya no habia ese delicioso aroma a bombones y tampoco había una casa llamada hogar. Solo era una vivienda abandonada y en renta. Supe ese día que se lo habían llevado y que yo no había llegado a tiempo para sacarle. Poco despues, surgio la idea de comprar una pequeña casa, comoda, pero perfecta para que 4 pudieramos habitar y convertirla en nuestro hogar. Fue dificil conseguirla, ya que ambos eramos estudiantes y trabajamos durante las noches para poder lograrlo. 

Ese día fui el más feliz; Viendo mi firma en el documento de que afirmaba que ese pequeño hogar ahora de nosotros. El inicio de todo fue complicado, dormiamos en un colchon inflable, hasta que poco a poco comenzo a ser decorado y amoblado, estaba todo listo, incluso teniamos un cuarto para mi hermano. Si, basicamente ese era mi idea, encontrarlo y poder tenerlo conmigo y darle la familia que se merece. Aunque los planes se fueron un poco de lado cuando jongho llego con la noticia de que estabamos en una dulce espera. Fue el tercer momento mas feliz de mi vida. Porfin todo estaba saliendo como deseaba, pero había algo que me molestaba de vez en cuando. 

𝐀𝐛𝐢𝐥𝐢𝐭𝐲 𝐭𝐨 𝐥𝐨𝐯𝐞 - 𝐒𝐚𝐧𝐰𝐨𝐨/𝐖𝐨𝐨𝐬𝐚𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora