NAMIKAZE

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Salto temporal: 1 mes

Naruto punto de vista

El último mes ya no pasó nada. Todos los genin de Konoha mantuvieron su distancia con nosotros, ya que se había corrido la voz de cómo había maltratado a Sasuke. Kabuto también había mantenido un perfil bajo según la información de Gaara.

Así que la mayor parte de mi tiempo libre lo pasaba con Temari, haciendo cosas al azar como caminar por el bosque de la muerte o simplemente mirar las tiendas sin comprar nada. Los días en los que entrenábamos los manteníamos para nosotros mismos, ya que realmente no podíamos ayudarnos unos a otros en los campos que teníamos que entrenar, ya que la mayoría eran solo prácticas y procesos de repetición.

El día antes de que comenzara la final, normalmente habríamos entrenado, pero decidimos simplemente sentarnos y descansar, ya que probablemente necesitaríamos toda nuestra energía para luchar en la final y defendernos de la invasión que se avecinaba. Habíamos notado muchos más anbu dando vueltas y patrullando la aldea, lo que demuestra que Hiruzen estaba tomando en serio la advertencia que Rasa le había enviado, después del segundo atentado contra su vida. También le había transmitido la información sobre los planes de Orochimaru que Gaara le había descubierto.

Entonces finalmente llegó el día. Temari y yo estábamos listos para partir y esperando a Gaara, quien llevó a sus compañeros a desayunar. Después de unos minutos de espera y de que Temari casi se queda dormida en mis brazos, Gaara salió del comedor y salimos del hotel a las calles de Konoha.

A pesar de que el sol apenas estaba saliendo, ya hacía mucho calor, lo cual se debía principalmente a la gran cantidad de personas que caminaban por las calles, siguiendo el camino hacia la arena. Gaara nos miró y luego a los tejados con una ceja levantada. Asentí, saltamos a los tejados y despegamos.

En la arena esperamos unos minutos hasta que aparecieran todos nuestros competidores. Mientras tanto estaba arreglando mi ropa, que era importante para mí, ya que la había elegido específicamente para este día, porque me hacía parecer casi a mi padre. Llevaba una bata larga blanca con adornos negros a lo largo de los brazos y un zorro negro en la espalda, junto con unos pantalones shinobi negros estándar y zapatos chapados en acero. Temari había querido que me quedara sin camisa, mostrando mis músculos, pero yo había insistido en usar una camisa negra con contornos naranjas, que era casi ceñida, para el disfrute de Temari. Recibí muchas miradas raras en nuestro camino a la arena y algunas personas susurraron que parecía el cuarto Hokage. El equipo Kakashi fue el primer equipo en llegar, mientras Sakura subía de rango, Sasuke y Kiba se acercaron a nosotros mirándonos mal pero manteniendo la distancia. Los siguientes fueron los dos hyuuga y su compañero de equipo, quienes no nos miraron en absoluto y simplemente se quedaron junto a nosotros hablando en voz baja entre ellos. Luego entró Shikamaru con su equipo, aunque fue el único que se quedó aquí abajo, sus compañeros deseándole buena suerte y subiendo de rango, uniéndose a Sakura y sus senseis. Por último, Tenten entró por la gran entrada, seguida por su compañero de equipo de spandex verde, quien también se acercó a sus compañeros genin. Entonces llegó Hiruzen, acompañado por dos ancianos, aparentemente sus asesores y dos anbu. Esperó frente a nosotros, hasta que el flujo de espectadores se calmó hasta que dejó que su anbu cerrara las grandes puertas. Luego nos sonrió a todos y subió las escaleras hasta la zona VIP donde estaban sentadas otras dos personas. Ambos tenían diademas alrededor de la frente pero el letrero que llevaban no se correspondía con ninguno de los cinco grandes pueblos. Era el signo del sannin, que identificaba a la mujer como Tsunade o la Princesa Babosa y al hombre de cabello blanco como Jiraiya o el Sabio Sapo. Me sorprendió ver a estas dos personas aquí, ya que se sabía que estaban fuera de Konoha el 99% del tiempo.

Hiruzen miró a las personas que habían venido a ver la final y dejó que uno de sus anbu disparara una bola de fuego al aire, llamando la atención de todos y efectivamente haciendo que la arena estuviera en completo silencio.

"Bienvenidos a todos a las finales de estos exámenes especiales de Chunin. Estos fueron los primeros exámenes chunin en los que participaron la mayoría de las grandes aldeas shinobi y permítanme decir que estoy orgulloso de que nuestra aldea haya sido elegida para realizar estos exámenes. Estoy aún más orgulloso de ver que hemos llevado a cabo con éxito esta tarea. Veo diez jóvenes genin que están esperando para mostrarnos lo que tienen reservado, y por cierto, siete de estos genin son de Konoha, lo que me llena de alegría", comenzó. Ante la mención de los siete genin de Konoha, la multitud aplaudió a sus hijos y compañeros shinobi. Después de unos momentos, cuando todos se calmaron nuevamente, Hiruzen sonrió. "Ahora bien, estos niños han pasado por muchas cosas en los exámenes anteriores. Tuvieron que resistir un ataque psíquico de Ibiki, luego tuvieron que luchar en equipos mientras atravesaban el bosque de la muerte y después de todo eso, tuvieron que luchar en peleas uno a uno, como hoy, para reducir el número de concursantes. . Finalmente, después de un mes de pausa, donde tuvieron tiempo de prepararse para sus peleas y entrenar aún más que antes, se encuentran en esta arena, con la esperanza de impresionar a sus senseis y poder ser promovidos a chunin después de haber luchado durante el torneo. ", continuó el tercer Hokage. La multitud volvió su atención hacia nosotros y nuevamente escuché algunas menciones silenciosas del nombre o título de mi padre.

"Ahora comencemos los exámenes. Hinata, Neji, Temari, Shikamaru, Sasuke, Gaara, Shino y Tenten, por favor salgan de la arena y entren a su área de espera", el genin mencionado salió de la arena, con Gaara asintiendo alentadoramente y Temari dándome un un beso rápido en la mejilla y un susurro "Buena suerte". antes de atravesar la pequeña puerta que conducía a un pequeño balcón que se encontraba unos metros debajo de las otras filas. "Por favor, denle la bienvenida al supervisor de este examen: Shizune, aprendiz de Lady Tsunade", gritó Hiruzen mientras la chica saltaba del estrado y aterrizaba entre Kiba y yo. "Ambos conocen las reglas. Empiezo la pelea y la termino, cuando uno de ustedes no puede continuar, grita que pierdes. Si continúas atacando aunque ya haya cancelado el partido o tu oponente haya perdido, estás descalificado. ¿Entendido?", dijo la kunoichi de cabello negro con voz dura, ganándose un asentimiento de los dos. Shizune miró al Hokage y asintió antes de alejarse unos pasos. Abrí mi espada y tomé uno de mis hiraishin kunai en mis manos. Akamaru saltó de la cabeza de Kiba y comenzó a crecer. "Conozca a nuestros dos primeros concursantes. Kiba Inuzuka de Konohagakure...", la multitud aplaudió al chico local, Hiruzen tuvo que esperar nuevamente a que se calmaran. "...y Naruto Uzumaki Namikaze de Sunagakure.", finalizó. Siguió un silencio de sorpresa, seguido de un grito de rabia. Pude distinguir algunas declaraciones entre la gran cantidad de gritos que se dirigieron hacia mí y el Hokage. "¡Se supone que está muerto!", "¡No se le permite estar aquí!", "¡¿Qué quieres decir con 'Namikaze'?!", fueron sólo algunas de las cosas que fueron dirigidas al Hokage. "¡Demonio, deberías morir!", "¡No te queremos aquí!", fueron los no tan sutiles insultos que me lanzaron, junto con algunas tazas que fueron arrojadas, pero que no llegaron a caer cerca de mí. Vi a Tsunade y Jiraiya hablar con el Hokage, y de vez en cuando me lanzaban una mirada. Temari y Gaara estaban a punto de perder la calma, pero se calmaron un poco una vez que los miré y sonreí. Mirando a los espectadores que todavía estaban alborotados, sacudí la cabeza. Con una mirada al Hokage, me encogí de hombros y me concentré nuevamente en Kiba. Hiruzen había visto la mirada que le había dado y otra bola de fuego silenció a la multitud una vez más. "No voy a explicar nada. Sí, me escuchaste bien cuando dije Naruto Uzumaki Namikaze. Pero esta muestra de falta de respeto es escandalosa. No está muerto como puedes ver y ya no es un shinobi de la hoja. Tiene permitido entrar en Konoha porque yo lo he dicho. Cálmate y disfruta de la final", bramó Hiruzen, bombeando una gran cantidad de chakra dirigido a los espectadores.

Suspiré y miré a Shizune. "Terminemos con esto de una vez", murmuré, adoptando una postura defensiva.

NARUTO:EMPEZAR DE NUEVODonde viven las historias. Descúbrelo ahora