CALLES DE LA CIUDAD

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Naruto punto de vista

"Entonces déjame aclarar esto. ¿Ese grupo quiere capturar a los Bijuu y están formados por ninjas desaparecidos de muy alto rango y están liderados por un hombre que posee el rinnegan?", Preguntó Temari con asombro y un poco de miedo. su voz después de que Tsunade nos contara sobre la información recopilada por Jiraiya. La Hokage solo asintió con el ceño ligeramente fruncido. "Está bien, ¿y por qué nos dices eso? Quiero decir, obviamente nos afecta, pero no nos dirías algo así sin que eso conduzca a algo", le pregunté, esperando que ella llegara al verdadero punto de esto. reunión. "Bueno, quería preguntarte si tal vez deberíamos formar un escuadrón con lo mejor de nuestras dos aldeas y eliminar esa amenaza antes de que se vuelva aún más peligrosa. Después de todo, ya capturamos a los nibi y sanbi. Creo que sería mejor". si los atacaríamos ahora antes de que puedan reunir aún más fuerzas.", propuso Tsunade mirándome expectante. "Bueno, estoy de acuerdo con tu plan, pero no puedo tomar estas decisiones, tendremos que hablar con el kazekage sobre eso y luego volveremos contigo", respondí, ganándome un asentimiento de Tsunade. "Por supuesto, eso es evidente", afirmó.

"Solo por curiosidad, ¿a quién querías tener en este grupo de ataque?", Le preguntó Temari al Hokage. "Estaba pensando en ustedes dos, por supuesto, quienquiera que decidieran sería de ayuda de su aldea y luego en Sasuke Uchiha, Kakashi, Asuma Sarutobi y Shino Aburame", respondió el Hokage. Temari asintió y nos despedimos, antes de salir de la oficina y volver a colocarnos las máscaras en la cara.

Cuando salimos nos miramos y puse una mano en el hombro de mi novia, antes de desaparecer en un shushin estándar.

Mirando hacia el pueblo, nos sentamos encima de la cabeza de mi padre con Temari apoyada contra mí, con su cabeza sobre mi hombro. "Sabes, este pueblo es hermoso", susurró Temari mientras observábamos las concurridas calles debajo de nosotros. "Sólo por fuera." Respondí con el ceño fruncido. "Sí, pero aun así, quiero decir que no podemos ver tanta flora en casa", continuó Temari. "Sí, supongo que tienes razón", murmuré, formando un plan en el fondo de mi cabeza para darle a nuestro jardín un poco más de variedad y color.

Cuando salió el sol a la mañana siguiente, le sonreí a mi novia, que dormía tranquilamente en mis brazos. Nos levantamos lentamente, nos pusimos nuestros uniformes y aplicamos un poderoso henge que nos ocultaría de cualquier enemigo potencial. Al salir del hotel caminamos por las calles, buscando a nuestro equipo y al ayuntamiento.

Cuando los encontramos, notificamos a nuestro equipo liberando una rápida ráfaga de chakra y observamos cómo desaparecían silenciosamente de las sombras. Le sonreí a Temari mientras seguíamos al grupo de políticos por la ciudad.

Aparentemente solo estaban mirando escaparates, así que hicimos lo mismo, manteniendo nuestros sentidos enfocados en ellos pero al mismo tiempo mirando a través de los escaparates y ocasionalmente entrando a una tienda cuando el ayuntamiento hacía lo mismo.

Pasamos por una pequeña tienda de ropa que vendía vestidos y kimonos de diseñador, una tienda de decoración donde, sorprendentemente, todos los del ayuntamiento compraban algo, desde cosas pequeñas como un reloj de pared hasta cosas grandes como una escultura gigante de la batalla del primero y Segundo Hokage.

Temari también compró algunas cosas, aunque la mayoría eran pequeños regalos para amigos cercanos como Gaara y Anko o Baki.

Después de salir de lo que parecía la centésima tienda, el ayuntamiento caminaba por una pequeña calle que conducía a aún más tiendas. Temari y yo de repente sentimos que se acercaban firmas de chakra y nos preparamos para interceptarlas.

Aterrizando frente al consejo nos paramos entre ellos y el shinobi desconocido.

Inmediatamente reconocimos al shinobi como parte de Iwagakure, ya que ambos vestían el uniforme del tengu negro.

"Entreguen el consejo", escuché exigir a uno de los shinobi enmascarados. Me reí entre dientes cuando Temari y yo dejamos caer nuestro henge. El grupo detrás de nosotros se quedó sin aliento cuando vieron el uniforme de nosotros dos. "Parece que Suna todavía los protege.", dijo el otro tengu negro.

Temari y yo sacamos nuestras armas, preparándonos para una pelea, aunque sabíamos que nuestros oponentes probablemente no atacarían en la ciudad, desde entonces tendrían que luchar contra Anbu y Jonin de Konoha, que fueron atraídos hacia el luchar debido a la mayor producción de chakra. Independientemente, los dos shinobi sacaron sus armas y doblaron las rodillas, preparándose para atacar.

Justo cuando estaban a punto de saltar hacia nosotros, tres Anbu aparecieron entre nosotros, con las armas en la mano.

"Detén esto ahora mismo", exigió el Anbu con la máscara de perro. Los dos tengu negros se miraron y se alejaron, antes de que el Anbu pudiera hacer algo más.

"Gracias", dijo simplemente Temari, mientras guardamos nuestras armas, y el Anbu se dio la vuelta, relajándose. "No hay problema. Si alguna vez te metes en más problemas, simplemente enciende tu chakra, siempre hay Anbu patrullando dentro de la aldea", respondió el lobo enmascarado Anbu.

Asentimos de nuevo, antes de dirigirnos al consejo para ver si estaban bien y acompañarlos de regreso al hotel. Pero cuando miramos hacia atrás no vimos nada más que un pequeño montón de sangre. Nuestros ojos se abrieron y encendí mi chakra nuevamente, atrayendo aún más Anbu al área y también llamando la atención de nuestros equipos que saltaron hacia nosotros casi de inmediato.

NARUTO:EMPEZAR DE NUEVODonde viven las historias. Descúbrelo ahora