Mirror [ChangIn]

09

Eran las 11 de la noche, y decir que Jeongin y Jisung no habían adelantado el trabajo era mentira, habían acabado ya casi la mitad de este y estaban verdaderamente agotados, mientras, Changbin estaba dormido en el sillón.

-Voy al baño, ya vuelvo.- dijo Jisung mientras sus ojos realmente parecían querer pegarse.

-Yo creo que es mejor dejarlo hasta aquí por hoy, voy a ir recogiendo mis cosas.- avisó Yang recibiendo un asentimiento por parte del pelinegro.

Recogió sus cosas en silencio, y al ya tener las misma a su espalda un gruñido se escuchó, proveniente del mayor.

-¿Ya nos vamos, Innie?- cuestionó sentándose mientras tallaba sus ojos con sus manos.

-Sí, ya me voy. Nos vemos en otra ocasión, hyung.- tomó la manilla de la puerta en espera de que el sueño de Seo lo haya hecho olvidarse que prometió llevarlo de vuelta.

-Espérame, tengo que ponerme los zapatos.- dijo levantándose y Jeongin apretó los labios.

-Puede quedarse. Yo me voy solo, hyung.- mencionó restándole importancia a la situación y Changbin se acercó a él a pasos lentos.

-¿Vamos a lo mismo, Innie?- cuestionó peinando algunas de las hebras rubias. -Eres un terquito, ¿Mhm?- añadió divertido, dejó un beso en el cachete del menor y se dirigió donde estaba su calzado, colocó sus zapatos y Jisung salió del baño.

-Nos vemos el lunes, Jeong.- se despidió de él dando un abrazo por los hombros y el mencionado correspondió, aún un tanto avergonzado por lo que había hecho Changbin.

-Adiós, Sung.- se despidió también cuando el pelinegro se había ido camino a su habitación.

Entonces Changbin sonrió a su dirección mientras abría la puerta, indicando al menor que pasase para después cerrar la misma.

Tomó su mano y lo guio por el pasillo hasta llegar al ascensor.

-¿Tienes sueño?- cuestionó de repente y Yang volteó a verlo confuso.

-No mucho, realmente. Estoy cansado pero no tengo sueño.- dijo y el mayor asintió.

-¿Quieres ir a algún sitio?- cuestionó sonriente y el de gafas correspondió a la linda sonrisa un tanto sonrojado.

-¿A dónde?- devolvió la pregunta y Seo se alzó de hombros.

-Tienes que dejarte llevar por mí. ¿Confías en mí?- cuestionó, seguía el agarre de su mano y el rubio asintió seguro.

-Sí, confío.- Changbin asintió y cuando las puertas del ascensor se abrieron salió, jalando al menor por la mano se adentraron en el coche y emprendieron camino en un cómodo silencio que era acompañado por la radio a un volumen agradable.

Changbin iba atento a la carretera, pero en ocasiones volteando en dirección al rubio, quien miraba curioso los alrededores alumbrados con luces artificiales.

-¿De verdad no me puede decir a dónde vamos?- cuestionó rompiendo el cómodo silencio en el que se encontraban.

-¿De verdad no puedes esperar?- devolvió la pregunta con tono divertido y el menor hizo un sonido en negativa. -Cuando yo era más pequeño sufría de insomnio y a veces me da también.- dijo y Jeongin lo escuchaba atento. -Entonces, cuando era pequeño y me quedaba a dormir en casa de mi abuela, ella me llevaba a su invernadero cada noche y eso siempre me relajaba hasta permitirme dormir.- dijo y el menor asintió.

-¿Vas a llevarme a un invernadero?- preguntó curioso, Changbin negó con su cabeza.

-No, a esta hora el único que conozco está cerrado.- dijo y Jeongin lo miró confundido.