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Al finalizar la primera hora del día Jeongin desenchufó su teléfono, tenía 71% de batería, pero ya tenía que cambiar de clase.

Iba en soledad, Seungmin tampoco había ido ese día.

Por lo mismo mientras caminaba al salón donde sería su próxima clase encendió su teléfono, asustándose ya que al introducir la contraseña de manera inmediata su teléfono empezó a sonar con miles de mensajes.

Tenía muchísimas llamadas perdidas de su madre, más de 200, mientras que en los mensajes se dejaba reflejar su preocupación.

Una llamada entrante más, así que respondió.

-¡Mierda, ¿Jeongin, estás bien, amor?!- cuestionó, se le notaba desesperada, el mencionado no pudo decir nada, estaba a penas procesando todo. -Innie dime que todo está bien... ¡Yang Jeongin!- gritó, las emociones ganándole.

-M-mamá... estoy bien, ¿Qué tienes?- se quedó de pie junto al pasillo, a un costado del mismo para no hacerle imposible el tránsito a otros estudiantes.

-¿Que qué tengo? ¿Dónde estabas tú? Tu última conexión es de ayer en la tarde, ¡¿Dónde estás? Me tenías preocupada!- dijo, realmente desesperada.

-Yo... no quería ir a casa ayer... lo lamento, tuve que habértelo notificado, mamá.- dijo, arrepentido porque ayer siquiera estaba pensando en su madre sólo podía pensar en que no quería pisar esa casa si ese hombre estaba allí.

-¿No querías ir a casa? ¡¿Qué te pasa? Eso es nuevo!, ¿Desde cuando te has perdido por casi un día sin aparecer ¡Vas a matarme!- gritó, escuchándose como lloraba a través de la línea.

-Yo... no pensé en ti. Lo siento, estaba sólo pensando en mí.- dijo, tratando de mantener la calma, sin embargo, empezó a caminar al baño, pues sabía que aquella calma no le duraría demasiado.

-¿Dónde estabas?- cuestionó, para entonces Yang estaba encerrándose en un cubículo, para llorar sin sentirse juzgado.

-Estaba con Changbin.- dijo simple, esperando comprensión de su parte.

Pero era difícil ser comprendido cuando no conocía ella las razones de su "desaparición".

-Oh... Changbin, ya veo ¡¿Acaso yo sé quién es Changbin, Yang Jeongin?! ¡Nunca me meto en tu vida porque estás grande y mira lo que me haces! ¡¿Cómo te vas a perderte con alguien a quien apenas conoces sin comunicación de ningún tipo?!- cuestionó, se escuchaba llorosa, Jeongin también lloraba.

Su madre jamás le había hablado así, nunca.

-No me perdí porque quisiese perderme, estábamos en una librería, luego dormí en su departamento y estoy en la universidad... Yo sólo no quería ir a casa, mami... no quiero... perdóname.- dijo, lloriqueando.

De pronto, escuchó como la puerta del cubículo era golpeada, vio por debajo de la puerta unos zapatos de mucha plataforma.

-¿Innie, estás bien?- cuestionó la otra voz que pronto reconoció como la de Jisung.

-¿Por qué no querías venir a casa?- preguntó, entre llantos la mujer a través de la línea, acaparando toda su atención de nuevo.

-Mamá... no quiero estar ahí, no si está él. Es igual que antes... es exactamente lo mismo. No me entiendes.- dijo, sintiéndose realmente mal, los pies de Jisung aún se veían allí, tal vez en espera por él.

-Sí te entiendo, hijo. Es mi hermano, sé que es molesto.- dijo, sin embargo Jeongin negó, millones de lágrimas abriéndose paso por sus mejillas hasta perderse en las ropas de Changbin.

-No me sirve que me entiendas si no haces nada para arreglarlo... es inútil que me entiendas si cuando no estás me trata igual que antes.- dijo simple.

-Innie...- él la interrumpió.

-Si quieres que vaya voy a ir, no te preocupes. Hoy no me voy a ningún sitio, te lo prometo.- dijo simple, -¿Quieres que me siente en una mesa a comer con él estando tú trabajando? Okey, lo voy a hacer. Pero después las lágrimas y los perdones no resuelven nada, mamá. Deberías de saberlo ya, y de sobra.- dijo, con tono tranquilo a pesar de sentirse molesto, impotente.

Nunca antes le había hablado así a su mamá, ambos estaban mínimamente sorprendidos por lo mismo. Ella no dijo nada, y Jeongin... necesitaba desahogarse de alguna forma.

-Yo... lo intenté, intenté separarme de mi realidad y créeme que me sirvió. Estuve con una persona que por primera vez me hizo sentirme en paz, me hizo olvidarme de todo, me escucha... y creo que nunca antes había sentido tan sincero un cumplido.- mencionó, ya sólo llorando, su voz apagada y quebradiza.

-¿Dé qué estás hablando, amor?- cuestionó curiosa, no entendiendo a qué se refería exactamente.

-Changbin, mamá. Changbin es la única persona que me ha hecho sentirme bien desde... no sé, ya ni recuerdo cuándo fue la última vez que había estado en paz conmigo mismo. Me quiere tanto que empiezo a quererme a mí mismo... y todo el progreso que tenía se fue... a la mierda al momento en el que Haeyoung entró a la casa. Me devolvió a esa miserable época... ¡Y no es justo! ¡No lo es!- dijo, ahora a quien superaban las emociones era a él.

Jisung por su parte estaba con su mano tapando sus labios, impresionado por lo que acababa de escuchar, no sabiendo si debía quedarse o irse.

-Voy para allá, no quiero estar más en clases por hoy.- dijo simple, trancó la llamada sin esperar respuesta de ningún tipo.

Estuvo en silencio en el baño, ignorando las llamadas que obviamente eran de su madre.

Se calmó y preparó para salir, se abrazó a sí mismo, sintiendo la tela de la camisa que portaba, esta era suave, la testeó con sus dedos y dio una corta sonrisa al ser consciente de que era de Seo.

-Binnie...- dijo en un susurro muy bajo, sin aliento, cual sólo puedo escuchar él.

En la clase en la que le correspondía estar estaba Jisung, el chico procesando todo lo que cree que no tuvo que haber escuchado.

Jeongin se fue a su casa, como le dijo a su madre que haría, sin embargo al momento de entrar se apresuró a subir y encerrarse en su habitación, escondido en sus sábanas envió un mensaje a Changbin.

"Hola, hyung. No voy a poder ir a lo de la tarde, de todas maneras muchas gracias por la invitación, en otra ocasión espero sí poder acompañarlos. ¡Disfruta mucho y come bien!"

Una llamada perteneciente al mayor estaba entrando en su teléfono, sin embargo no quería contestar, aún lloraba mucho, el mayor se daría cuenta de su estado, y no quería hacer otro drama.

La llamada con su madre le dejó claro que sólo estaba exagerando las cosas. 

duckkchi🌷

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