The alters || Factor R

Capítulo 8

ㅡBuenos días, linda ㅡdijo Rocio, viendo a la media dormida Samantha que se frotaba sus ojitos, la rubia sonrió al verla y se acercó a ella para dejar un suave beso de buenos días en sus labiosㅡ. Estás preciosa hoy.

ㅡSiempre dices lo mismo, todos los días ㅡdijo la mayor, bostezó, aún bastante dormida.

ㅡSerá porque estás preciosa todos los días.

Samantha sólo podía sonreír y ruborizarse.

En las últimas dos semanas habían estado muy empalagosas, nunca había sido un secreto que a Rocio le gustaba dar amor, pero no sabía que Samantha quería muchas muestras de amor y era muy necesitada.

Por más que a veces se hiciera la difícil, quería mimos y amor todos los días.

Cada oportunidad la usaba para darle un beso, o abrazarla, dormían juntas y paseaban de la mano, sonreía más que nunca.

Rocio sólo podía admirarla con ternura y amor, porque era un ser muy cariñoso, y le encantaba.

Desde que habían empezado con esa relación informal, porque no habían arreglado ser nada aún, las otras Alters aparecían mucho menos.

ㅡRivers no quiere salir porque ella es heterosexual y que una mujer esté cerca le afecta un poco ㅡdijo Samantha, estaban en la cafetería de la universidad, como les era recurrente.

ㅡHey, deja que la chica tenga sus gustos, si no le gustan los pechos está bien, los pitos no están tan mal después de todo.

ㅡEse fue el mejor comentario que te he escuchado decir ㅡdijo Rivers, su voz grave anunciaba su presenciaㅡ. No te voy a insultar está vez, te felicito.

ㅡQué honor, y viniendo de una chica tan linda ㅡle guiñó un ojo, con una amplia sonrisa, Rivers hizo una mueca de asco y se fue, dejando a una Samantha confundida

ㅡ¿Me perdí de algo?

ㅡNo realmente ㅡdijo Rocio, tomó su mano y entrelazó sus dedosㅡ. Samantha, ¿Cuándo tendrás una cita conmigo?

ㅡCuando me invites.

ㅡ¿Cuándo estás libre?

ㅡLos fines de semana.

ㅡ¿Quieres salir conmigo este fin de semana?

ㅡClaro que sí ㅡdijo, y sonrió ampliamenteㅡ ¿A dónde iremos?

ㅡQuiero ir al centro comercial y pasar una tarde en los juegos.

ㅡSi me llevas a los juegos Samy va a tomar el control, le encantan los juegos, las luces y los premios de peluche... Tengo que hablar con Rivers y preguntarle si es debido, es una niña.

ㅡLo sé, Samantha, siempre podemos cambiar los planes e ir al cine o algo.

ㅡSé que cuidarás muy bien de Samy, ella no sale mucho, estaría bien darle un gusto.

ㅡ¿Puedo tener una cita con Samy en los juegos? Y después te llevo a comer a dónde quieras.

ㅡA un restaurante de hamburguesas.

ㅡHecho.

ㅡSerá la mejor cita de mí vida ㅡdijo la rubia, notoriamente feliz.

Ambas estaban muy felices y muy cómodas juntas, incluso podrían definirse como unas tontas, porque sonreían todo el día y cuando estaban a solas pensaban tanto en su compañera que se distraían de sus clases o de lo que estuvieran haciendo.

ㅡSeñor Barner ㅡllamó Rocio, la clase había terminado y sus compañeros se retiraban del aula, quedando los dos a solasㅡ. Quería comentarle sobre mí trabajo.