༻꧂🦋 ℒ𝒶𝒹𝓎 ℬ𝓇𝒾𝒹ℊℯ𝓇𝓉ℴ𝓃 || 𝑅𝑒𝑚𝑢𝑠 𝐿𝑢𝑝𝑖𝑛 🦋꧁༺

🦋꧁༺ 𝑃𝑟𝑜𝑙𝑜𝑔𝑜

𝖤𝖱𝖠 1810 𝖴𝖭𝖠 𝖵𝖤𝖹 𝖬Á𝖲 𝖣𝖮𝖭𝖣𝖤 𝖲𝖮𝖸 𝖴𝖭𝖠 𝖲𝖤Ñ𝖮𝖱𝖨𝖳𝖠 𝖢𝖠𝖲Á𝖣𝖤𝖱𝖠, ese era el insufrible pensamiento de Eloise Bridgerton desde que debutó.

Ha tenido varios contratiempos desde que descubrió que su mejor amiga Penélope Featherington resultó ser Lady Whistledown. Algo que dejo a Eloise triste y decepcionada.

Cuándo había bailes se sentía incómoda, de no ser que bailaba con su hermano mayor, ya sea Benedict Bridgerton o Colin Bridgerton; y de vez en cuando con algún que otro pretendiente disponible y aceptable.

Pero la realidad era que Eloise Bridgerton no le interesaba, solo quería tener conocimiento y ser respetada como cualquier  hombre. Eso jamás pasará. Será una solterona aún que a su madre la viuda vizcondesa Violet Bridgerton.

Sus únicos intereses eran el saber más, ser independiente y jamás casar se con un hombre estúpida en un mundo con esteriotipo. . .

Pero una noche en un baile donde Lady Danbury que estaba organizando salió en la mitad de uno para tomar aire. Había visto a su vieja amiga Penélope Featherington, al pasar no se sintió lista, ni para  mirar la ni para dirigir le una palabra. Así que salió a tomar aire afuera. El aire fresco nocturno la hacía sentir mejor al igual que su corazón comenzaba a tomar un ritmo normal. Al suceder miro al cielo y como si la escuchará deseaba “deseo salir de aquí”. Pero el destino siempre actúa de una forma tan extraña, y los deseos se cumplen de una forma diferente, es decir, de una manera que jamás imaginamos.

Eloise Bridgerton se sintió mareada y débil, su cuerpo fallaba y cayó del balcón con sus ojos cerrados esperando el impacto.

Al abrir sus ojos se dio cuenta que no le dolía nada, se levantó y se sacudió el vestido con cuidado. Al notar lo que había a su alrededor la dejo confundida y desorientada, pues no recordaba que los terrenos de Lady Danbury fueran tan oscuros, con árboles realmente grandes y ambiente tetrico. Sin miedo y con posible duda comenzó a caminar para volver al dichoso baile, pero al pasar horas se rendió. Ya que estaba preocupada, la casa de Lady Danbury no era tan lejos. Escucho ramas crujir y otros ruidos raros, ya asustada comenzó a correr sin saber a dónde terminaría.

Salió del bosque y vio casas a lo lejos, aliviada de que había vuelto a Londres , aún que en realidad no era Londres de 1810 exactamente.

Al llegar aquel pueblo noto algo raro, vio un letrero que señalaba “Hogsmeade" y otro que decía “Hogwarts”, estaba arta y cansada no entendía que diablos eran aquellas palabras tan extrañas. Camino por el lugar con la esperanza de encontrar algo familiar o a alguien por lo menos. Cosa que jamás paso.

Exhausta, enoja y frustrada se sentó en alguna parte bajo un pequeño techo. El piso se veía algo sucio y con polvo. Y a los segundos la lluvia cayó a cántaros. Triste se refugio entre sus piernas comenzando a llorar.

Mientras a unos pasos un hombre algo viejo con barba y túnica azul vio a la hermosa joven llorar. Se preguntaba de dónde venía la viajera, ya que su vestimenta no era muy usual en la ropa de brujas de moda. Y era bastante joven como para vestir así. Su conciencia le advertía que tuviera cuidado, ya que podría tratar se de alguna trampa, por los tiempos de ahora.
Lo pensó unos minutos y camino hacia ella para saber si estaba bien, pero al momento que la castaña alzo su mirada la vio con los ojos hinchados, nariz roja y lágrimas escurriendo por sus mejillas. Su corazón se contrajo y le extendió la mano. . .