𝕃𝕀𝕋𝕃𝔼 𝕃𝕀𝔼 -ℝ𝕐𝕌 𝕊ℍ𝕀-𝕆 𝔽𝔸ℕ𝔽𝕀ℂ𝕋-

010

-Me estas diciendo que estuviste a punto de follártelo en su oficina -murmuro asombrado- No conocía esa faceta tuya unnie. 

-Vamos Na-min, lo peor es que Nam-soon pudo haber escuchado algo -me comi la uña de mi pulgar-

-Nah no creo, pero por las dudas quédate con Suho hoy, sabes que si tuviera apartamento te alojaría pero vivo con papá -me vio apenado-

-No te preocupes Na-min, haz hecho suficiente con escucharme -le sonreí- me voy con Suho, cuídate 

Sali del estudio de fotógrafa del padre de Na-min y me dirigi a la casa de mi mejor amigo, el buen Suho que ayuda a todos los necesitados cuando lo necesitan, y yo como buena vagabunda que soy necesito alojamiento. A Suho lo conocí mientras estudiaba y nos hicimos amigos muy rápido ya que mi personalidad era muy extrovertida en ese entonces. Suho y yo fuimos inseparables desde entonces, el me enseño que la amistad entre un hombre y una mujer si existe y estoy muy agradecida por eso, ya que lo amo tanto, que es como mi hermano.

Toque el timbre y a los minutos se escucho un grito de Suho, sabia que tardaria más ya que probablemente se acaba de levantar. Suho no es alguien que madrugue ya que trabaja como reportero, el tiempo que tiene libre lo utiliza sabiamente, o sea lo usa para dormir como oso.

-Ah -suspiro el cansado- ¿Qué haces aquí tan temprano James? -me pregunto con un ojo cerrado-

-Necesito vivienda Suho -dije suplicando- 

-Agh -se quejo el- Pásale pero me cuentas el chisme del porque te echo Hwang

-Chismoso -lo mire con los ojos entrecerrados mientras pasaba- 

Y le Conte todo a Suhoito y me pregunto mil cosas inapropiadas, y más cosas sobre el porque no le había contado nada. Ya después de eso, ambos salimos a comer y posiblemente emborracharnos, para ahogar nuestras penas en alcohol, lo cual se nos había hecho costumbre desde 3er de secundaria. 

-Vámonos a casa ya -dije cansada al ver a Suho tirado en la mesa-

-Quiero más soju -dijo babeando- Más soju 

-No, no más soju para ti Suho -lo lleve fuera del restaurante-

Así comencé a caminar con mi mejor amigo casi a rastras, y corriendo el riego de ser asaltada, mientras ponía el código en la cerradura eléctrica, me cuestionaba seriamente que carajos hacia allí, si amar a alguien no es pecado, el pecado es lo que hace pero eso me da cinco hectáreas de mierda. Deje al borracho en su cama, y tomé mi celular con ganas de arreglar mi vida, asi que marque el número del causante de todos mis problemas hasta ahora. 

-¿Hola? -se escucho a través de la linea-

-Lo siento por todo lo que te dije, no era cierto, me gustas mucho, pero no podemos estar juntos, se lo que haces, se que vendes droga, por eso me debo alejar de ti, aunque no quiera Ryu Shi-o eres mi hombre ideal, me gustas como eres, tal vez en otras circunstancias podríamos estar juntos... pero ahora no, lo siento Shi-o, perdón por amarte, porque si, te amo más que a mi misma Ryu, adiós -colgué la llamada mientras lagrimas se deslizaban por mis mejillas- 

¿Este era el final? Al menos era mi final con Ryu, aunque me matara por dentro, el y yo somos como el sol y la luna, nunca podremos estar juntos, aunque me muera por hacerlo, jamás podre ser de el, ni el mío.