Heroes and Villians || Crossover || BNHA/TW ||

Prologue: The Awakening of the Unknown

Estaba cayendo.

Su cuerpo caía hacia el vacío al cual se dejó caer como una señal de rendición y libertad.

Ya no le importaba nada. Solo quería terminar con el sufrimiento que llevaba aguantando durante una década. Todo estaba llegando a su fin, podía sentirse más cerca del concreto, podía escuchar los gritos de algunos de sus compañeros y de sus antiguos profesores, tambien podia oir la voz de pánico de aquel que en un inicio le había dado la idea de realizar aquel acto que para muchos sería cobarde pero para alguien como él sería liberador.

Oh mi querida... magnífica... y noble flor del mal

Cerró los ojos a ver por última vez el claro cielo antes de entregarse a la oscuridad.

Eres la mas hermosa de todas

Sus cabellos revoloteaban por el viento que dividía el suelo de su cuerpo.

Espejo, Espejo... por favor dime quién será...

Dejó salir una sonrisa antes de chocar con el pavimento haciendo que se formara un ruido sordo y repugnante que fue opacado por los gritos de pánico como los llantos de aquellas personas que hicieron su vida un infierno.

Los que son aceptados por el espejo de las sombras

La gente era tan hipócrita, a pesar de sus últimos momentos de vida podía oír sus arrepentimientos, burlas e inclusos llantos vacíos que lo rodeaban, también estaban aquellos lamentos que no servirán de nada.

Él se estaba desangrando en el suelo.

En sus últimos momentos él pensó en todos los problemas que tuvo que enfrentar gracias a su estado peculiar, no se le permitían muchos derechos así como se le limitaron las oportunidades de escuelas como de trabajo.

Con solo escuchar a su madre llorar todas las noches sobre los problemas que le ha causado su corazón se achicaba. La mujer que le dio a luz lo amaba, de eso no había duda, pero no era difícil descubrir que el distanciamiento que tenía con su padre se debía a su causa, el hombre se había ido apenas se enteró que no tenía peculiaridades, poniendo como excusa los viajes al extrangero eran por trabajo.

Luego el acoso escolar y la denigración con la que lo trataba la gente no había ayudado en nada su decisión de saltar desde ese tejado.

Entre abrió los ojos para encontrarse con la mirada carmesí de Bakugo. Las lágrimas y la desesperación en su rostro no las había visto desde que eran niños y se habían topado con un villano que se le había ocurrido esconderse en el preescolar a que asistían.

Siguió sonriendo mientras se desangraba, el sonido de las sirenas se empezaban a oír a lo lejos y la voz amortiguada de Katsuki intentaban mantenerlo despierto, pero sus párpados no parecían ceder a las exigencias.

"¡Oe!¡No te duermas", gritó el rubio, desesperado, no dejaba de sacudirlo y gritarle cosas de las que se arrepentía. No esperó que Izuku realmente siguiera su consejo de tirarse del techo, sabía que el menor era terco y fiel a sus creencias y sueños por lo que se le hacía difícil entender el que el peliverde se rindiera fácilmente a sus palabras. "¡Oye, Deku! ¡Izuku! ¡Zuzu!"

Mientras tu corazón lo desee

La oscuridad lo rodeaba, el frío que sentía era sin duda mil veces peor que el frío invierno y su cuerpo no dejaba de buscar la calidez del sol inexistente. Se acurrucó en el suelo oscuro buscando protección. Podía recordar sus últimos momentos de vida, la ambulancia y las patrullas policíacas se estacionaban a las afueras de Aldera y muchos de los estudiantes abrían el paso a los especialistas que socorrerian a su compañero de clase, fue difícil separar al chico explosivo, que se aferraba a la víctima buscando que se despertara.