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                                By Bill !

Se me bajó la tensión por un momento.
Mi hermano, con el que casi acabo en la cama había llegado ya a casa.
Ya no era una sospecha, estaba completamente seguro de que el que me pegó fue Tom.

Salí rápidamente de la casa, esquivando a toda la multitud de personas. Ya había gente por el suelo, peleando, bailando...

Busqué el coche de mi madre, que lo había aparcado en frente de la casa, pero no estaba. El corazón me dio un vuelco y empecé a preocuparme. Busqué con la mirada por todos los sitios y no, no estaba.
No lo pude evitar, pero mis ojos comenzaron a ponerse llorosos. Caminé por todos sitios, en busca del coche, pero al parecer me lo robaron. Ni rastro del coche.

¿Ahora qué hago?

Mi madre me castigará de por vida si le pierdo el coche, además de que se lo cogí sin permiso.
Esta, sin duda está siendo la peor noche de mi vida.

Noté un nudo en la garganta, cada vez más intenso. Las lágrimas salían inconscientemente de mis ojos. No me lo podía creer, acababa de perder el coche de mi madre.
Me acerqué a un árbol y lo pateé con todas mis fuerzas, con toda mi rabia.

—¡Joder! ¡Joder! —grité, alargando la "e".
Pateé el árbol, sin importar que mi pie se lastimara. Todos me miraban, pero me daba igual. Ahora lo único que me preocupaba era el coche de mi madre. Pero no estaba, ni rastro de él.

Miré a los lados y vi a Kira, saliendo con unos amigos de la casa. Al parecer ella estaba drogada. Esto no me daba una buena sensación. Decidí acercarme a ellos.

—Kira —la llamé, acercándome.

—Bill. No hace falta que me lleves, ellos me van a llevar a casa —me dice Kira, con voz sensible.

Miré a los chicos que llevaban a Kira de ambas manos. No demostraban buenas intenciones.

—Kira, vámonos —la agarré del brazo. Los chicos la forzaron, pero conseguí soltarla de ellos y alejarnos de ahí.

Arrastré a Kira lejos de ahí y comenzamos a caminar hasta casa de Kira.

—¿Y tu coche? —me pregunta, agarrándose a mi brazo.

—No lo sé... —le respondí, mientras caminábamos, mirando al vacío.

Kira mira al suelo, confusa.
La verdad es que no quiero llegar a mi casa, siento que volverme a ver con Tom llegará a ser un momento incómodo, después de lo que pasó aquella noche.

Al fin llegamos a casa de Kira, después de unos veinte minutos. La acompañé hasta la entrada de su casa.

—Gracias por llevarme —me agradece, con una sonrisa.

—No hay problema —le respondo, orgulloso.

—Bueno, hasta mañana —se gira Kira.

—Mañana es sábado.

—Bueno, pues hasta el lunes —ríe, negando con la cabeza.

—Duerme bien —me despido, alejándome.

Camino durante unos quince minutos hasta llegar a mi casa.
Me posiciono delante de la entrada e inspiro fuertemente, preparándome para lo que me espera.

Llamé al timbre y me abrió Tom.
Me quedé helado. Él, simplemente se retiró para dejarme pasar.

—No vuelvas a drogarte, o las pagarás muy caro —me susurra al oído, amenazante.

Tu estrella favorita (TOLL) - by AddiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora