Cuando más te necesite - Adaptación (Minayeon)

Capítulo 7: Tu calor

No sé cuánto tiempo había pasado, sentía un horrible dolor en todo mi cuerpo y un frio espantoso. No me podía mover mis extremidades estaba congeladas. Mire a mi alrededor la nevada había aumentado de intensidad, tanto así que ya no podía ver en dirección a mi casa. Intente levantarme pero no podía. Mi cuerpo estaba inmovilizado y no sentía una de mis piernas. El temor corro por mi cuerpo.

Comencé a sentir miedo. Podría morir aquí congelada, mi Leah mi pequeña Leah sola en casa. Yo sé que Nayeon no me dejara, cuando vea que no estoy me buscaría, pero no sabrá donde estoy. Todo mi cuerpo comenzó a tener fuerte espasmos por el frio hace rato que no sentía ninguna de mis dos piernas. Moriría aquí congelada a pocos metros de mi casa. Mire hacia el cielo y solo podía ver la nieve blanca cayendo y después de todo no sería una mala forma de morir.

- MINA-escuche la voz de Nayeon - MINARI DONDE ESTAS?!?!?!- se estaba metiendo a la tormenta por mí-

- Na... Nayeon- mi voz salió muy suave y en un tembloroso susurro. Reuní todas mis fuerzas para sacar un fuerte grito- NAYEON!!!!!-

- Minari... Mina donde estas habla?!- la escuchaba tan cerca pero no la podía ver- MINAAAAA!-

- ACÁ NAYEON!- volví a gritar usando todas mis fuerzas

- Minari - había llegado a mi lado- Minari dios que tienes?- se arrodillo a mi lado y se llevó las manos a la cabeza- que te duele? te sientes bien?- podía notar su desesperación en su voz-

- No, ayúdame- suplique

- Ok espera- intento levantarme pero no pudo- comenzó a sacar la nieve que me cubría- Santo Dios... espera Minari te sacare- pude sentir como movías mis pies y dolor punzante me corrió por mi pierna derecha.

- Me duele- me queje

- Lo se cariño, espera- deje de sentir la punzada en mi pie y vi como la escalera caí a un lado mío- te moveré... puedes pasar tus brazos por mis hombros-

- Creo... me pesan- conteste al sentir mis brazos entumecidos por el frio-

- Solo inténtalo cariño- Levante mis brazos y la sujete, ella me levanto pasando sus brazos por debajo de mis piernas y mi espalda. Me había levantado sin mayor esfuerzo-

- Tengo frio- le dije escondiendo mi rostro en su cuello-

- Ya... ya te tengo vamos a la casa-

Nayeon me llevaba en sus brazos a través de la nieve. Había nevado tanto en estos pocos minutos o solo Dios sabes cuánto estuve inconsciente. Mire hacia abajo y vi como los pies de Nayeon es hundían en la nieve fresca. Todo mis cuerpo tenia fuertes espasmo y casi no sentía los dedos de mis manos completamente entumecidos por tenerlo tanto tiempo expuesto al frio, lo mismo con mis piernas. Podía escuchar el esfuerzo que estaba haciendo Nayeon para llevarme de vuelta a la casa a través de la nieve. Estoy segura que estaba a solo metros de mi casa pero aun no la podía ver.

- Tranquila cariño ya casi llegamos, estarás bien...solo aguanta- era las palabras de consuelo que decía mi castaña.

Sentí que subía unos escalones y vi que estábamos llegando a la terraza,
se las ingenió para abrir la puerta corrediza conmigo en brazos y entrar a al interior de mi casa. La casa estaba caliente pero no era nada, aun sentía un horrible frio en todo mi cuerpo.

- Te llevare a tu cuarto- me dijo mientras cruzando la cocina, y el pasillo hasta las escaleras a enorme pasos-

- El... el de... el de mis... padres- dije mientras mis dientes castañeaban fuertemente.

- Segura?-

- Si... chi...chimenea- todo mi cuerpo temblaba fuertemente.

Subió las escaleras conmigo en brazos y abrió la puerta del cuarto. Luego me puso en la cama delicadamente como si fuera lo más frágil del mundo. Comenzó rápidamente a cubrirme con las sabanas algo polvosas por la falta de uso desde la muerte de mis padres. El cuarto de mis padres aparte de ser el principal contaba con calentador y una enorme chimenea. Nayeon prendió el calentador y comenzó hacer lo mismo con la chimenea-