Seguía pensando, pensando y pensando, no entendía esta resta, no sabía muy bien lo que debía de hacer para que el 3 se restará con el 9. Que podía hacer?
<<plaas>>
Otro correazo en la mesa que había dado mi madre como advertencia de lo que conseguiría si no lograba terminar mis tareas. ¿a caso eres una niña bruta?, preguntaba mi querida madre, agaché mi cabeza y mis lágrimas de temor recorrían mi rostro.
<<plaas>>
Último correazo en la mesa.
No recuerdo que paso luego de eso, pero se que mi madre tenía sus razones para pegarme, pues era una niña bruta y no podía seguir así. Recuerdo que mi madre le dio un puño a la mesa, luego de unos minutos procedió a darme unas palmadas en la cabeza, luego azotó mi cabeza contra la mesa, yo ya no sabía que más hacer, solo sentía mi cuerpo temblar de dolor, le dije que ya no podía más, que me explicara de nuevo, me puse a llorar demasiado y ella solo me dijo:
"Deja de llorar, si quieres llorar de verdad te daré unas buenas razones"
Procedió a darme 6 correazos muy fuertes en mi espalda, nunca me daba las razones para llorar de verdad, siempre espere que me dijera sus buenas razones, lo único que me decía era que siempre me pegaría correazos dependiendo el número de mi edad.
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NO ERES TU, SON MIS TRAUMAS
Nezařaditelnéesto no es un libro o una historia profesional, esto es una vida real, algo que te puede pasar a ti o alguien que conozcas. en esta historia que relataré te contaré la vida de una persona la cual pasó por muchas cosas. es una historia que nunca term...
