magic library ⁕ cravity

16: te perdono

wonjin estaba desesperado, su corazón latía con fuerza mientras corría por los pasillos de la clínica. el sonido de sus pies resonaba en el silencio del lugar, su mente solo podía pensar en llegar a donde estaba hyeongjun. después de salir de la estación de policía, recibió una llamada informándole de aquel intento de suicidio de su amigo, eso lo dejo aturdido y lleno de angustia.

serim lo seguía de cerca, tratando de mantener el paso con wonjin. sus ojos reflejaban preocupación a pesar de aún no entender la magnitud del asunto. wonjin finalmente llegó a la habitación donde yacía hyeongjun, conectado a diversos aparatos que monitoreaban su estado.

el rostro de wonjin estaba pálido, sus manos temblaban al ver a su amigo en esa situación. serim lo abrazó con fuerza, tratando de transmitirle calma y apoyo en medio de la desesperación.

—¿qué fue lo qué pasó?...

—necesitamos esperar, amor.

—¡no puedo esperar!

—ven, tranquilo.

serim lo apartó, llevándolo a un sitio más tranquilo mientras esperaban noticias. después de un rato, el doctor apareció y dijo en voz alta:

—¿familiares de song hyeongjun?

—¡yo, yo soy! —wonjin se acercó a toda velocidad, serim lo siguió—. soy su mejor amigo.

—¿y sus padres?

—sus padres están en camino, estaban en un viaje de negocios.

el doctor asintió.

—bien.

—¿y?... ¿cómo está?

—no fue grave, solo sufrió algunos síntomas de hipotermia al caer al río. afortunadamente, fue encontrado rápido y tuvo mucha suerte.

—¿se pondrá bien?

—sí, pero ahora es mejor que descanse.

wonjin asintió, conteniendo sus lágrimas.

—está bien...

el doctor se retiró y wonjin tomó aire, mirando a su novio.

—yo me quiero quedar...

—no podemos. ya escuchaste al doctor, necesita descansar.

—pero...

—te acompaño a casa, vamos.

wonjin accedió, no le quedaba otra opción.

se subieron en el auto y serim comenzó a manejar directo a casa de wonjin para intentar procesar todo lo que habían vivido. al llegar, se encontraron con una escena totalmente inesperada. la policía estaba allí, poniendo bajo arresto al padrastro de wonjin.

—¡no se lo lleven, por favor!

decía una señora bastante joven, era la madre de wonjin.

una vez se llevaron a su padrastro, pudo cruzar miradas con su madre.

—¡solo traes problemas a la familia! eres desagradecido por haber denunciado a tu padrastro, un hombre tan bueno.

—¡tú sabes lo que me hacía, mamá!

—¡y aún así nunca te faltó nada, ni a ti ni a tu hermana!... eres un miserable.

—mamá...

—¡quiero que te vayas! desde hoy dejas de ser mi hijo... no quiero verte más. ¡eres lo peor que me pasó!

wonjin se quedó paralizado por un momento, sintiendo que no tenía a dónde ir.

—¿y a dónde voy a ir?... ¡mamá!